PAMPLONA, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Policía Foral ha imputado en la última semana a ocho conductores por delitos contra la seguridad vial. Seis de los arrestados son por casos de alcoholemia, entre los que figuran dos que se negaron a realizar las pruebas, y los otros son por circular con el permiso retirado por pérdida de puntos y por conducir un vehículo a motor sin haber obtenido nunca el carné.
El conductor imputado por circular con el carné en periodo de suspensión temporal por la pérdida de puntos reglamentarios es un vecino de Pamplona que fue interceptado el miércoles, 1 de diciembre, en Berrioplano tras sufrir un accidente de tráfico leve.
Por su parte, el detenido por conducir un vehículo a motor sin haber obtenido el carné es otro pamplonés de 45 años que fue sorprendido el lunes, 29 de noviembre, en un control en Cordovilla, según ha informado el Gobierno en una nota.
Entre los imputados por casos de alcoholemia positiva figura un varón de 49 años vecino de la merindad de Pamplona que se quedó dormido al volante en medio de la calzada en una calle de la capital navarra. Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado, 4 de diciembre. Una patrulla de la Policía Foral observó un vehículo parado en medio de la calzada con el semáforo en verde. Al ver que no arrancaba fueron a comprobar qué ocurría y entonces vieron que el conductor se encontraba dormido. En las pruebas de alcoholemia arrojó una tasa superior a la de 0,60 miligramos de alcohol por litre de aire espirado.
Los otros imputados por alcoholemias positivas son un ciudadano francés que fue interceptado el sábado, 4 de diciembre, en un control en Urdax y dos varones, uno de 32 años y vecino de Tafalla y otro de 41 y con residencia en Tudela, que superaron la tasa penal de alcohol en sendas pruebas realizadas en esta pasada noche del lunes, 6 de diciembre, en Tafalla y Monteagudo.
La lista de imputados por delitos contra la seguridad vial se cierra con dos conductores que presentaban claros síntomas de haber ingerido alcohol pero que se negaron a realizar las pruebas correspondientes. Uno de ellos, pamplonés de 49 años, se vio implicado en un accidente el pasado martes, 30 de noviembre, en Beriáin. El hombre viajaba solo y resultó herido leve. Los agentes lo detuvieron al negarse a realizar las pruebas de etilometría, tanto las de aire como las de analítica de de sangre.
El otro imputado por el mismo motivo es un varón de 35 años vecino de la Sakana que fue interceptado en el casco urbano de Lakuntza. Los agentes vieron que tenía claros síntomas de haber tomado bebidas alcohólicas, pero el conductor se negó a someterse a las pruebas.
