Sanz, dispuesto dirimir la competencia sobre la construcción del TAV en la Junta de Cooperación si logra el Gobierno

PAMPLONA 21 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno foral y candidato a la reelección, Miguel Sanz, aseguró que si se mantiene en el cargo está dispuesto a elevar a la Junta de Cooperación Navarra-Estado un "conflicto de competencias" sobre a qué Administración le corresponde construir el tren de alta velocidad.

A la vista del anuncio de la semana pasada del secretario de Infraestructuras de que los proyectos de obra no se encargarían hasta hasta 2009, Miguel Sanz afirmó que si continúa al frente del Ejecutivo hará "los últimos intentos de negociación" y, en caso de que no prosperen, encargará la ejecución, con lo que previsiblemente se planteará un conflicto de competencias con el Estado.

En la Junta de Cooperación, en caso de ser el jefe del Ejecutivo, expondrá que Navarra "no puede ser tratada de manera desfavorable o no igualitaria respecto al tratamiento de la CAV". Según defendió, si bien la competencia de la construcción de la TAV es del Estado, "también la competencia para ejecutar obras la tiene Navarra, luego vendrá la financiación".

En la rueda de prensa que siguió a la última sesión del Gobierno antes de que entre en funciones, Miguel Sanz defendió que el interés autonómico se integra en el interés general de España. "No creo que tengamos muchas dificultades para explicar nuestras razones en una hipotética junta de Cooperación que pueda convocarse al respecto", indicó.

La semana pasada el secretario de Infraestructuras, Víctor Morlán, manifestó que el proyecto del TAV se podría encargar en 2009 si los estudios sobre los trazados que realizó el PP son válidos, cuestión que se conocerá dentro de dos meses.

En opinión de Sanz, este anuncio "no es creíble porque es difícilmente entendible que se esperen a la campaña electoral de 2007 para hablar de la posibilidad de encargar el proyecto del TAV en el año 2009". Según dijo, se trata de un "planteamiento muy poco electoralista, porque lo normal es que si a uno le guían buenas intenciones hubiese venido a firmar el acuerdo al que el ha instado el Senado para poder ejecutar las obras por parte del Gobierno foral y financiarlas vía convenio económico, como se ha hecho con la CAV".

"Hubiese sido lo razonable y hubiese evitado comentarios como el que previsiblemente tendremos que meternos en formol para ver el tren de alta velocidad si esperamos a que la Administración de Zapatero pueda hacerlo", comentó el presidente.

Miguel Sanz afirmó "sinceramente" que el Gobierno central carece de "voluntad" para ejecutar el TAV debido a que "las compensaciones electorales en las que permanentemente está pensando el presidente del Gobierno de España no son lo suficientemente importantes como para abordar una inversión de esa naturaleza, una obra de gran trascendencia y coste económico".

Así, comparó la situación de Navarra con la de otras CCAA en las que se están impulsando corredores de alta velocidad. "Escuché que Vigo iba a tener de inmediato el TAV y las obras de Zaragoza-Teruel están en marcha porque van a una zona francamente poblada y por tanto tienen intereses electorales".

Sanz insistió en que no entiende por qué no se firma un acuerdo similar al de la CAV. "Además, no entiendo cómo no se nos permite negociar algo cuando estamos dispuestos a ceder, colaborar y contribuir para que el descuento de la aportación de Navarra al Estado se hiciese en cómodos plazos", dijo. "Estamos dispuestos a soportar el costo económico de esa obra", aclaró.