Actualizado 06/01/2007 16:52

Crónica ETA.- Rescatan de entre los escombros el cadáver de Estacio, la segunda víctima de ETA desde 2003

- Los forenses barajan como hipótesis de su muerte el aplastamiento o la inhalación de gases

MADRID, 6 Ene. (OTR/PRESS) -

A las 9.35 horas de hoy, tras 38 horas de incesante trabajo, el cuerpo de bomberos logró rescatar de entre los escombros el cadáver de Diego Armando Estacio, cuando se cumple una semana del atentado de ETA en el aparcamiento de la T4 del aeropuerto de Madrid-Barajas. Este ciudadano ecuatoriano se ha convertido en la segunda víctima mortal de la banda terrorista de los últimos tres años, después de que en mayo de 2003 asesinara a dos policías nacionales. Según los primeros informes de los forenses, Estacio falleció por insuficiencia respiratoria, aunque barajan como hipótesis de su muerte el aplastamiento o la inhalación de gases.

En el momento del rescate del cuerpo de Estacio se encontraban en las inmediaciones del hospital de campaña el director de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, Joan Mesquida; el comisario jefe del aeropuerto, Carlos Villanueva; el director de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Madrid, Alfonso del Amo; y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón. El primer edil resaltó el "contraste brutal" entre los miles de madrileños que ayer disfrutaron de la cabalgata de los Reyes Magos y "la tristeza con la que van amanecer, cuando comprueben que ETA ha vuelto a matar".

Tras una semana de búsqueda, el cadáver de Estacio, de 19 años de edad, fue liberado esta mañana de la prisión de hierro y escombros en la que se convirtió su coche. Los bomberos tardaron 38 horas desde la localización del vehículo del ciudadano ecuatoriano hasta su extracción, precisamente justo cuando se cumple una semana del atentado de ETA en el aparcamiento de la T4 de Barajas. De entre las ruinas del módulo D del párking, también se rescató el pasado miércoles a su compatriota Carlos Alonso Palate.

Las muertes de Estacio y Palate han puesto fin a un periodo de tres años y medio sin víctimas mortales por parte de la organización terroristas ETA, desde que ésta asesinara en mayo de 2003 a dos policías nacionales en Sangüesa (Navarra). Julián Embid y Bonifacio Martín, de 53 y 56 años, respectivamente, fallecieron por la explosión de una bomba-lapa que los terroristas habían adherido a los bajos del vehículo del Cuerpo Nacional de Policía que utilizaban como oficina móvil del DNI.

REPATRIACIÓN A ECUADOR

Ya a las puertas del Instituto Anatómico Forense, el vicepresidente segundo de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, explicó que Estacio "falleció por insuficiencia cardiorrespiratoria" según revelo la autopsia, aunque apuntó que los forenses barajan como hipótesis de su muerte tanto "el aplastamiento como la inhalación de gases". El cuerpo de Estacio fue embalsamado y conducido, a las 16 horas, a la base aérea de Torrejón de Ardoz, desde donde fue repatriado a Ecuador en torno a las 17 horas.

Por petición de la familia del ecuatoriano se ofreció un oficio religioso íntimo en el Instituto Anatómico Forense, que realizó un cura facilitado por el Arzobispado de Madrid. Winston Estacio, padre del fallecido, explicó que una vez que el avión de la Fuerza Aérea Española que llevará a su hijo aterrice en Guayaquil, él y los 30 familiares que acompañarán el féretros se desplazaran hasta la localidad ecuatoriana de Machala, donde se celebrarán los oficios fúnebres.

Winston Estacio dijo estar "destrozado" por el asesinato de su hijo, pero "contento" por haber puesto fin a una semana de búsqueda en la que los familiares han estado "desesperados y angustiados". Visiblemente emocionado, recordó el trabajo que le costó traer a su hijo a España, donde llegó hace tres años y donde ya estaba totalmente asentado. Tanto el Ayuntamiento como la Comunidad de Madrid, decretaron hoy Día de Luto Oficial y todas las banderas de todos los edificios municipales de la capital ondearon a media asta.

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