- Así podrán acogerse al 'plan rescate'
WASHINGTON/MADRID, 22 Sep. (OTR/PRESS) -
La Reserva Federal estadounidense ha aceptado la reestructuración de los dos grandes bancos de inversión del país, Morgan Stanley y Goldman Sachs, en holdings permitiéndoles tomar depósitos o pedir préstamos permanentemente del Banco Central, aunque teniendo que pasar por su supervisión. Ambas entidades de inversión no estaban en condiciones de aguantar solas la crisis y han tenido que pasar bajo la red de seguridad del Gobierno.
La Reserva Federal americana ha exigido a Morgan Stanley y Goldman Sachs que transformen su estructura y se conviertan en entidades de banca tradicional lo que implica abandonar su negocio de banca de inversión. Con el fin de poder conceder "una mayor ayuda" crediticia a estas entidades, ambos bancos de inversión perderán su especificidad para poder tener acceso permanente a la ventana de descuento de la Reserva federal. Además, la Fed también autoriza la extensión de crédito a las filiales de Goldman Sachs, Morgan Stanley y Merrill Lynch en Londres.
Esta iniciativa, que está sujeta a un periodo de espera de cinco días para obtener luz verde de las autoridades antimonopolio, estaría encaminada a que las tres entidades puedan acudir a los fondos de emergencia de la institución, permitiéndoles tomar depósitos o pedir préstamos permanentemente del Banco Central, pasando a ser supervisadas por este mismo banco. Teóricamente, estos bancos de inversión no dependen de la Fed, por lo que no estaban incluidos en sus préstamos de urgencia, aunque estas normas se modificaron de forma temporal hasta enero. Ahora, Morgan Stanley y Goldman Sachs se tendrán que someter a un mayor control de las autoridades. El diario 'Wall Streel Journal' señaló que "estas medidas marcan el fin de Wall Street como lo conociamos después de decenas de años".
La medida, que acaba con más de ocho décadas de independencia de las dos firmas más importantes de Wall Street en banca de inversión, supone también el cerrojazo de un modelo de negocio sobre el que se ha construido el actual sistema financiero desde la Gran Depresión. De hecho, la crisis que sacude actualmente los mercados ha puesto en evidencia que este tipo de banca ha acumulado demasiados riesgos.
BAJO EL PARAGUAS DEL GOBIERNO
El movimiento, el último paso del Gobierno para solventar la caótica situación financiera por la que atraviesan los mercados, pone a los dos bancos de inversión más importantes bajo la red de seguridad del Gobierno.
El grupo Goldman Sachs ha anunciado hoy que se convertirá en el cuarto holding bancario más grande del mundo y será regulado por la Reserva Federal norteamericana. Goldman ha añadido que moverá sus activos de una serie de negocios estratégicos hacia una entidad llamada GS Bank USA, que tendría más de 150.000 millones de dólares en activos. Así, GS Bank USA será uno de los diez grandes bancos en Estados Unidos con activos totalmente financiados a plazo y disponibles para ser financiados por la Reserva Federal.
El consejero delegado de Goldman Sachs, Lloyd C. Blankfein, ha asegurado que "bajo la supervisión de la Reserva Federal, Goldman será considerada como una institución aún más segura, con un balance excepcionalmente limpio y una mayor diversidad de fuentes de liquidez".
El Grupo Goldman Sachs es uno de los grupos de inversión más grandes del mundo. Fue fundado en 1869 y tiene su sede principal en el Bajo Manhattan de Nueva York. Además, tiene repartidas múltiples oficinas de gran importancia financiera por todo el mundo. Goldman Sachs actúa como asesor financiero para algunas de las compañías más importantes, grandes gobiernos y ricas familias del mundo y es el enlace primario en el mercado de seguridad del Tesoro de Estados Unidos. A ambos lados del Atlántico atesora 20.000 millones de dólares en depósitos.