Crónica Robo.- Muere un guardia de seguridad y otro resulta herido grave en el atraco a un banco en Sevilla

- Trasladaban sacas de dinero desde una entidad bancaria a un camión cuando fueron tiroteados

SEVILLA, 15 Jul. (OTR/PRESS) -

Un guardia de seguridad de 48 años falleció hoy y su compañero resultó herido grave en la localidad sevillana de Viso del Alcor cuando ambos trasladaban sacas con el dinero recaudado desde una entidad bancaria hasta un camión. En ese momento, un desconocido les disparó y una vez en el suelo se llevó el dinero, mientras que los guardias quedaron heridos graves y fueron trasladados al hospital. Poco después, fallecía uno de ellos, mientras su compañero sigue en estado grave, aunque su vida no corre peligro.

Eran las 10.40 horas de la mañana, cuando los dos guardias de la empresa Prosegur se disponían a meter el dinero recaudado por una entidad bancaria al camión blindado en el que lo iban a trasladar, en la calle Real de la localidad Viso del Alcor. De repente, un desconocido los sorprendió y la emprendió a tiros contra ellos hasta que los dejó inmóviles en el suelo y entonces se apoderó del dinero y se dio a la fuga.

A la llegada de los servicios sanitarios, comprobaron que las heridas que presentaban los guardias eran graves y estaban inconscientes, por lo que los trasladaron a los hospitales sevillanos de Virgen del Rocío y Virgen de Valme. Sin embargo, poco después uno de los agentes, de 48 años, moría en el hospital Virgen del Rocío, a consecuencia de la hemorragia causada por el impacto de bala en el abdomen que recibió.

Mientras tanto, su compañero permanecía en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), con varios disparos, "hasta cinco", según indicó el alcalde de la localidad, Manuel García Benítez, aunque según las primeras valoraciones del personal sanitario su vida no corre peligro.

Apenas unos instantes después del tiroteo, más de 40 agentes de la Guardia Civil se desplazaron al lugar de los hechos para establecer un dispositivo con el objetivo de controlar todas las salidas del municipio e intentar evitar la huida del agresor, al mismo tiempo que recababan toda la información posible de los testigos de los hechos para identificar al individuo, que según las primeras informaciones, huyó junto a otra persona, que le esperó hasta que recogió todas las sacas.

Tras lo ocurrido, la Federación de Actividades Diversas de CCOO-A criticó que Prosegur no había dotado al agente fallecido de las medidas de protección "adecuadas" para el servicio que realizaba. De hecho, añadió que el trabajador "se encontraba realizando horas extras en Prosegur Transporte de Valores, que es la empresa encargada de transportar las sacas con dinero". En este sentido, añadió a través de un comunicado que en el momento de los hechos estaba realizando funciones de escolta "sin contar con las medidas de protección adecuadas, pues, en concreto, no disponía de chaleco antibalas".

LOS VECINOS INTENTARON SOCORRERLES

Algunos testigos que presenciaron el tiroteo observaron a "un individuo con un casco subiéndose a una moto" de color negro acompañado de otra persona que huyó con él. Así lo declaró ante los periodistas un trabajador de la zona, que vio cómo el colaborador esperaba al agresor para marcharse juntos del lugar de los hechos.

Por su parte, otro testigo afirmó que en la plaza de abastos donde se produjo el tiroteo "hubo mucho revuelo, la gente salió corriendo" y volvió una vez que se habían dejado de escuchar tiros. "Al salir vimos a los dos guardias de seguridad heridos, uno de ellos estaba tirado en el suelo, pero no pudimos ver al agresor", explicó.

Un tercer testigo afirmó que al salir a ver lo que había ocurrido observaron a un vigilante de seguridad "tirado en el suelo, con varios tiros, inconsciente y muy grave", mientras que otro se mantenía de pie "apoyado en la pared". Asimismo, indicó que rápidamente llegaron los servicios sanitarios aunque los vecinos ya habían empezado a socorrerle, "incluso un vecino le había hecho un torniquete en la pierna a uno de los vigilantes". Además, añadió que los guardias "hacían siempre el mismo recorrido", aparcaban el furgón en la puerta principal de la plaza de abastos y cruzaban hasta la calle trasera donde se encuentra el banco.