José Cavero (1).- La banda vuelve al oficio de matar

MADRID 6 Jun. (OTR/PRESS) -

Eso, por lo menos, es lo que cabe temer para los próximos días: que ETA, una vez ha dado por concluida la singular tregua anunciada, vuelva a su oficio de siempre, el de matar ciudadanos inocentes. Lo cierto es que la decisión de los jefes de la banda, explicada en publicaciones afines, venía siendo anunciada desde distintos medios informativos, citando como procedencia a fuentes policiales y del Centro Nacional de Investigaciones, CNI. Este mismo lunes, El País había anunciado con notable despliegue tipográfico que CNI y policía alertan de que ETA prepara la vuelta a la violencia, y que los servicios antiterroristas temían que la banda actúe a corto plazo. Añadía que ETA se había convencido de que no puede conseguir sus objetivos políticos con la simple amenaza de romper la tregua. Al mismo tiempo, varios diarios más anunciaban que la banda había enviado nuevas cartas de extorsión a empresarios en las que pide 15.000 euros en billetes de 10, 20 y 50 euros. Bien es cierto que otras fuentes señalaban que "una Batasuna eufórica presionará a Zapatero para reabrir el proceso, y que intentaría convencer al presidente, debilitado por el 27-M, de que obtendría importantes réditos electorales.

Pero, una vez más, se ha impuesto "la línea de fuerza" y la peor de las decisiones posibles y previsibles, tras buscar pretextos, pero firmemente decidida a dar por finalizada la fase de prolongación condicional del alto el fuego, una vez que ya la policía había alertado de la capacidad operativa de ETA. Y en ese punto estamos: ETA rompe la tregua y reabre su actividad en todos los frentes. Los terroristas anuncian en un comunicado el final del alto el fuego a partir de la medianoche del martes al miércoles, alegando que no se dan las condiciones mínimas para seguir negociando con el gobierno . La revista Berria y el diario Gara eran los encargados de anunciarnos la pésima noticia: que este miércoles ETA ha dado por acabado el alto el fuego que comenzó el 24 de marzo de 2006. Curiosamente, "los estrategas" de la banda criminal vuelven a incluir a Cataluña y a todos los políticos en sus objetivos y dicen que sólo aceptará la independencia.

Cualquiera, sin embargo, puede recordar y tener en cuenta que este extraño y singular alto el fuego permanente se cobró dos muertos en la víspera de fin de año, en la terminal 4 del aeropuerto de Barajas, y que la banda probablemente no cesó nunca en su campaña de extorsión a empresarios, y que la violencia callejera tampoco llegó a desaparecer del todo en muchas localidades de Euskadi. En suma, una tregua parcial, siempre bajo sospecha de que no hubiera tal, aunque sirvió para que alguna vez nos hiciéramos a la idea de que los criminales de ETA tal vez llegaran a proyectar su cambio de oficio definitivo...

José Cavero.