MADRID 22 Ene. (OTR/PRESS) -
Destacan los cronistas que la asistencia de eurodiputados fue escasa, que Zapatero no empleó papeles, pero que su intervención suscitó interés. Había suficiente expectación por conocer los propósitos de José Luis Rodríguez Zapatero para el semestre de presidencia europea. Zapatero comenzó hablando del compromiso español con la UE, debido a la "gran transformación de progreso y bienestar" conseguida por España en los 25 años que lleva en el club. Ese compromiso se traduce en la intención de ejercer una presidencia con iniciativa en los cuatro frentes que considera cruciales: economía, política, relaciones exteriores y ciudadanía. El presidente del Gobierno español, explicó las prioridades de la presidencia española de la UE que comenzó el pasado 1 de enero, haciendo votos por que la Unión "apueste por sí misma", y refuerce y profundice en su unidad, tanto económica como política y social. Ha articulado sus prioridades en cuatro ámbitos -economía, nuevas instituciones, relaciones exteriores y ciudadanía europea-. En el área económica, a la que ha dedicado más tiempo, ha hecho propuestas concretas, como un pacto social entre trabajadores y empresarios a nivel europeo, y ha señalado objetivos más difusos, como una "estrategia común para el coche eléctrico". En lo social, ha propuesto una orden europea de protección para las mujeres maltratadas. El área económica es la que le ha ocupado más tiempo, sobre todo debido a los efectos de la "crisis más grave en 80 años". En esta área, Zapatero ha articulado las medidas en cuatro puntos.
- Energía. Ha apostado por una reducción de la dependencia energética, que ha subido en los últimos 10 años del 44 al 53%, "lo que se traduce en 67.000 millones de euros que la UE transfiere a otros países del mundo cada año, lo mismo que dedican todos los miembros a I+D+i". Ante esta situación, propone un "mercado común de la energía", para el cual es necesaria la "interconexión energética" de las regiones europeas y un "marco regulador común". Avanzar en este camino supondrá reducir la dependencia y el aumento del uso de las energías renovables, a su juicio.
-Tecnologías de la información. También ha apostado por un "mercado común digital", dado que entiende Zapatero que la inversión en tecnologías de la información hace avanzar a los países. Este mercado común digital implica, para el presidente, "levantar barreras, no ponerlas", así como "facilitar el comercio electrónico", lo que redundaría en más competitividad y creación de empleo.
- Economía sostenible. En este ámbito ha destacado como ejemplo la intención de la presidencia española de "poner en marcha con la Comisión Europea un plan de desarrollo del coche eléctrico", plan que impulsaría la lucha contra el cambio climático y contribuiría a reducir la dependencia energética.
- Educación. En el ámbito educativo se ha referido especialmente a la Universidad y la investigación. Propone "culminar" el proceso de Bolonia (homogeneización de los títulos universitarios europeos) para conseguir una "Universidad más europea". Cree Zapatero que Europa debe competir en bloque porque "otros actores tienen el tamaño de China, India o EE UU". Por tanto, si no se da "la mejor formación a los trabajadores Europa no será protagonista del futuro, sino espectadora" de un mundo globalizado. Zapatero también se refirió a los cambios políticos que debe afrontar la UE ahora, sobre todo la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, que rediseña las instituciones europeas. Zapatero reiteró que la presidencia española será "leal y colaboradora" con las nuevas instituciones: presidente permanente, alta representante para la política Exterior, Comisión y Parlamento. Ha pedido una "gobernanza seria y exigente" para afrontar esos cambios. En cuanto a las relaciones exteriores, ha glosado la ambiciosa agenda de la presidencia española, con cumbres en las que se dialogará con "prácticamente todos los continentes", pero siempre en colaboración con el presidente permanente, la alta representante Exterior, la comisión y el Parlamento. También en este ámbito, aboga Zapatero por que "Europa apueste por sí misma", defienda sus intereses y fije objetivos ambiciosos. Finalmente, habló de los cambios que se avecinan en lo relativo a la ciudadanía europea. Cree que el Tratado de Lisboa hará que los "ciudadanos sientan más cerca a la UE", con instrumentos como la iniciativa popular. También desea un avance en un "derecho de ciudadanía que es la igualdad entre hombres y mujeres". En este sentido, ha priorizado la lucha contra la lacra de la violencia contra las mujeres, que considera "inasumible" en una sociedad avanzada como la europea. Como instrumento de esa lucha ha propuesto "la orden europea de protección" para mujeres maltratadas. También ha destacado como "irrenunciable" la "cohesión e inclusión social frente a la pobreza". En este asunto ha propuesto "un gran pacto social entre empresas y trabajadores" para avanzar en esa cohesión.
La crisis económica, el Tratado de Lisboa, las relaciones exteriores de la Unión Europea y los avances sociales centraron hoy el discurso que el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, pronunció en el Parlamento Europeo, donde presentó las prioridades de la actual Presidencia española de la UE. Los grupos políticos escucharon con interés sus propuestas en un momento de cambios, marcado por la entrada en vigor del Tratado de Lisboa.
La mayor sorpresa posiblemente la proporcionó el principal partido de la oposición, que esta vez sí, dio su aprobación y su aplauso a los planteamientos del jefe del Gobierno en esta otra faceta de presidente de turno de la UE... El Presidente también dio su agradecimiento al PP español por el apoyo a la Presidencia española de la UE, "un factor muy positivo que pone de manifiesto la voluntad común europeísta".