- Los peritos destacaron la dificultad a la hora de extraer conclusiones, ya que el cadáver se encontró casi esqueletizado MÁLAGA, 29 Nov. (OTR/PRESS) -
Nueva jornada del juicio por el caso Wanninkhof. Hoy fue el turno de los forenses que analizaron el cuerpo de Rocío tras ser encontrado y que actuaron como testigos. Los peritos aseguraron en su declaración que las nueve puñaladas que recibió la joven "son compatibles con una sola arma" y que coincide con la navaja que el acusado, Tony Alexander King, describió ante la Guardia Civil el día de su detención. Además, destacaron la dificultad a la hora de extraer conclusiones tras la autopsia, ya que el cuerpo se encontró ya prácticamente "esqueletizado".
Los peritos explicaron que las hipótesis se tuvieron que argumentar en las manchas de sangre halladas en el lugar donde se produjo el crimen, en las marcas dejadas por el arma en los huesos y en las dos camisetas que la joven llevaba puesta esa noche, debido a que "no tenemos los órganos que habrían sido dañados", ya que el cuerpo se encontró en un grado de descomposición "excepcional", que les provocó "asombro", ya que se correspondía con uno que hubiera pasado de tres a cinco años o seis meses, si el cuerpo hubiera estado a la intemperie.
En cuanto a la razones de la muerte, concluyeron que la víctima recibió una puñalada en el tórax por la parte delantera, que pudo ser "la más mortífera" por los órganos a los que podría haber afectado, ya que no impactó en los huesos; y ocho por la espalda, de las que cinco chocaron contra el esqueleto y tres habrían pasado entre las vértebras y podrían haber llegado también a órganos vitales. Además, manifestaron que las ocho puñaladas de la espalda se encontraban muy juntas, "agrupadas", lo que supone que la joven no se movía y "posiblemente estaba caída en el suelo", bien porque estaba ya muerta, porque la estaban sujetando o porque estaba inconsciente.
Respecto al arma blanca utilizada, los dos peritos del Departamento de Análisis de la Guardia Civil, que analizaron las dos camisetas que llevaba la víctima, declararon que ambas presentan cortes similares y muy bien definidos, que se corresponden con un arma muy afilada, de un solo filo y que la navaja descrita por el acusado "pudo producir esas lesiones".
NO HAY HUELLAS DE KING
Durante la jornada también declararon otros seis peritos respecta a los análisis realizados sobre las huellas encontradas en los escenarios del crimen. En este sentido, dijeron que la única huella encontrada de la que se podía sacar información, localizada en una cinta aislante color naranja de la valla donde apareció el cadáver, no es de King, ya que dio resultado negativo en la identificación, tras cotejarla con los registros nacionales.
Por su parte, los expertos del Instituto Nacional de Toxicología señalaron que se descartó el uso de productos corrosivos que ayudaran a la descomposición del cuerpo y apuntaron que se pudo producir tan rápidamente porque "se dio la temperatura y la humedad convenientes", aparte de que la vegetación "también acelera el proceso".
