Actualizado 19/02/2008 01:00

Rafael Torres.- El beso

MADRID 19 Feb. (OTR/PRESS) -

Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón se han dado un par de besos en la inauguración de un intercambiador de transportes, y con esa puesta en escena reconciliatoria el PP ha querido disipar la sensación de división interna del partido en la plaza fuerte, electoralmente muy fuerte, de Madrid. No hacía falta: los aguirristas y los gallardonistas, esto es, los votantes de derecha que simpatizan con la una o con el otro, e incluso aquellos que detestan al otro o a la una, votan invariablemente lo mismo: al PP. Es lo que tiene la derecha, que sólo hay una, como madre, en tanto que las izquierdas son diversas, heteróclitas y plurales, cuando no antagónicas e irreconciliables. La causa podría estar en que en tanto la derecha no es exactamente una ideología, sino una adscripción de clase, de casta, de religión y/o de defensa de privilegios, la izquierda pertenece al territorio de las ideas, y ya se sabe que no hay dos cabezas iguales, pese a los esfuerzos de uniformarlas un poco con el traje de de la ideología.

Aguirre y Gallardón se han dado un beso, dos, y podían llegar a mayores (figuradamente) si los intereses que ambos representan, que son los mismos, corrieran algún riesgo a causa de su enconamiento personal, que yo creo que es amor, concretamente del género sadomasoquista. Por desgracia, en ésta sociedad envilecida por el cotilleo, el beso de marras suscita más atención y seguimiento que las políticas de quienes se lo han propinado: esa "Operación Guateque" con que la Justicia pretende sajar el extendido tumor de la corrupción en el Ayuntamiento, o esa gestión demenciada de la Sanidad Pública que organizó, para la consecución de sus designios, una "caza de brujas" sin precedentes contra sanitarios no afectos al régimen. En fin; que Aguirre y Gallardón se han besado, que serán felices, que comerán perdices, y que a nosotrosnos darán con la puerta en las narices.

Rafael Torres.

Contenido patrocinado

Foto del autor

Carmen Tomás

Verifactu: una chapuza anunciada

Foto del autor

Julia Navarro

No nos olvidemos de Ucrania

Foto del autor

Fermín Bocos

Moción de censura: el que pierde gana

Foto del autor

Antonio Casado

¿Cuándo se jodió el PSOE?