Varios niños en un aula de Barcelona. - Alberto Paredes - Europa Press
MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
UGT ha pedido reducción de ratios y horas lectivas de cara a la negociación del anteproyecto de Ley para la mejora de las condiciones del profesorado no universitario, mientras que la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE) ha expresado su "profunda preocupación" por la exclusión de la enseñanza concertada.
El sindicato UGT ha recordado que el número de horas de clase que imparte un docente español "es superior tanto en Primaria como en Secundaria al de sus colegas de la UE, lo que implica tener que dedicar menos tiempo al resto de las tareas".
Consideran, en este sentido, que el anuncio de reducción de horas lectivas realizado por el Gobierno debe ser un primer paso hacia la reducción progresiva de la carga lectiva a 18 horas para el profesorado de Infantil y Primaria y a 15 horas para el de Secundaria y Bachillerato.
En opinión de UGT, el número de alumnos atendidos por el profesorado también influye "significativamente en las condiciones de trabajo de los docentes". Por ello, ven prioritario realizar un análisis del contexto en el que se desarrolla la labor docente, así como buscar mecanismos que combinen reducciones en ratios y horario lectivo que impliquen la rebaja efectiva y real del número de alumnos de los que tiene que hacerse cargo el profesorado en contextos en los que "la labor docente se realiza en situaciones más difíciles o en agrupamientos por encima de la media".
Por ello, han valorado "de forma satisfactoria el anuncio realizado" por parte del Ministerio de Educación para avanzar en una reforma profunda de este aspecto y que implique la reducción por ley de la ratio en aulas con alumnado con necesidades especiales y en centros docentes situados en zonas de complejidad social.
DISCRIMINACIÓN SEGÚN FSIE
Sin embargo, para FSIE el borrador de anteproyecto de ley el texto vuelve a dejar fuera a la enseñanza concertada, lo que "ahonda en la brecha de desigualdad y en la falta de equiparación de las condiciones laborales del profesorado".
El sindicato denuncia que esta discriminación no es nueva, "sino el resultado de más de 15 años de inmovilismo ministerial". Durante este tiempo, las condiciones laborales de los docentes de la concertada "han quedado relegadas, a lo que se suma la infrafinanciación de los centros, que incluso dificulta el acceso a derechos reconocidos por ley, como la jubilación parcial".
Por todo ello, FSIE exige que durante la tramitación de la futura ley se incorpore a la enseñanza concertada. "No se trata de un privilegio, sino de una cuestión de justicia y derecho que no puede seguir aplazándose". "Los trabajadores de la enseñanza concertada están cansados del inmovilismo y no se descartan movilizaciones en defensa de sus derechos y de la igualdad de oportunidades para todas las familias", ha indicado Enrique Ríos, secretario general de FSIE.