ZARAGOZA 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha concluido la primera campaña del Programa de Prospección y Detección Precoz para comprobar la extensión del mejillón cebra en estado larvario en la Cuenca. Dentro de este programa se han realizado muestreos en 70 embalses en el Ebro y afluentes, que representan el total de las masas catalogadas como navegables en la Cuenca. Las tomas de muestras y los análisis se han realizado aplicando una metodología que permitirá realizar un seguimiento en estas masas.
Esta primera campaña se realizó en los meses de noviembre y diciembre, en una época de escasa reproducción del mejillón cebra, aunque estas fechas se justifican por los hallazgos, a partir de septiembre de 2006, que indicaban el avance del molusco invasor en la Cuenca.
Las conclusiones reflejan que los muestreos sólo han dado nuevos resultados positivos en la determinación de fase larvaria del mejillón cebra (Dreissena polymorpha) en los embalses de La Sotonera (en Astón y Sotón) y Ardisa (en el río Gállego), ambos en Huesca, además de Ribarroja y Mequinenza, donde ya es conocida la presencia de mejillón cebra adulto.
En el informe realizado sobre los muestreos, se destaca que tanto en La Sotonera, como en Ardisa, se han detectado larvas en muy baja densidad, de hecho, una sola larva a cinco metros de profundidad en La Sotonera y otra a dos metros de profundidad en Ardisa, datos que no son representativos.
La CHE continuará desarrollando el próximo verano este programa de prospecciones para conocer el verdadero alcance del mejillón cebra en estado larvario. Los meses entre junio y septiembre son los de mayor actividad reproductiva de este molusco.
A pesar de estos resultados, por el conocimiento actual de la situación del estado larvario y de la presencia de mejillón cebra en la Cuenca, el Organismo mantiene el mapa de afección potencial presentado en noviembre y que extiende la presencia del molusco a la práctica totalidad de la Cuenca, con excepción del embalse del Ebro y los que regulan los afluentes del Ebro en el País Vasco (embalses de Ullívarri en el Zadorra y Urrúnaga, en el Santa Engracia) y los afluentes de La Rioja (cuencas del Najerilla e Iregua), donde todavía no se ha detectado ningún indicio.
El Organismo en sus muestreos de estado larvario de mejillón en ríos de la Cuenca realizados en octubre y noviembre de 2006 detectó la presencia de larvas en afluentes de la margen izquierda de la Cuenca (Arga en Huarte, Gállego, en Ardisa; Ésera, aguas abajo del embalse de Barasona; Segre, aguas abajo del embalse de Oliana y Noguera Pallaresa en Camarasa). Además en la margen derecha se ha confirmado en el río Martín, en Oliete, aguas abajo del embalse de Cueva Foradada y en el Guadalope, en Caspe.
En canales los muestreos de larvas han dado positivos en el Canal de Bardenas, Canal de Lodosa y Canal Imperial de Aragón.
Las actuaciones para un mayor conocimiento de la afección por mejillón cebra en la Cuenca del Ebro y para frenar en lo posible su propagación siguen las líneas del Programa A.G.U.A. (Actuaciones para la Gestión y la Utilización del Agua) del Ministerio de Medio Ambiente.