MADRID 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El continente africano luchará con "una voz unificada" por un lograr un acuerdo multilateral que le permita un desarrollo limpio durante la Conferencia de las Partes de la ONU sobre Cambio Climático que se celebrará el próximo mes de diciembre, aseguró hoy el director de la Federación nacional de Productores Agrícolas de Kenia, John Mutunga, que advirtió de que no lograr un acuerdo de la comunidad internacional "sería letal y desastroso" para el mundo y, "especialmente" para África que podría "desaparecer muy rápido".
Así, explicó que la "voz africana" pedirá en Copenhague que la temperatura de la Tierra no se sobrepase el crecimiento de 1'5 grados Centígrados --en vez de 2 grados propuestos por otros países y la Unión Europea--, y que se establezca un fondo de ayuda a los países en desarrollo "separado de los mecanismos tradicionales de financiación internacional" que reparta recursos a los menos favorecidos bajo la tutela de la Convención de las Partes de la ONU. "Los sistemas de financiación internacionales imponen condiciones que no promueven e impiden el desarrollo", justificó.
No obstante, el representante de los productores agrícolas keniano manifestó que África tiene un "gran potencial" en las áreas de adaptación y mitigación que servirán para "mejorar las condiciones de vida" porque, a su juicio, es "posible" avanzar en fuentes energéticas alternativas que hasta ahora no se han fabricado ni se ha accedido a ellas en el continente y que deberían ser "baratas y accesibles".
En cuanto a las posibilidades de reducción de emisiones, Mutunga defendió que África "sólo" es responsable del 3,8 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero de todo el mundo por lo que sus niveles de emisión no deberían bajar sino seguir creciendo porque eso "significaría el no progreso para África". Por ello, apostó por "contener la contaminación pero no por reducir".
Mientras tanto, alertó de que los impactos del cambio climático en el continente negro no son "futuros" sino que "están sucediendo ya" y sus efectos se notan en que las estaciones y los patrones de lluvias están cambiando, de modo que las precipitaciones son cada vez más cortas pero más virulentas, y tras ellas llegan sequías "cada vez más profundas".
Además, apuntó que las enfermedades "también están cambiando", como el mosquito de la malaria que cada vez es capaz de vivir a mayor altura y bajo temperaturas más frías. Todo esto, añadió, está llevando a la población africana a desplazarse a las tierras altas, dejando sin agua para el consumo, la agricultura y la pesca a los que permanecen en las tierras bajas.
En ese sentido, subrayó que el 40 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de África procede de la agricultura y, con el cambio del clima, los niveles de malnutrición están creciendo. "En Kenia, 2,5 millones de personas comen gracias a programas del Gobierno, que tiene que desviar parte de la ayuda al desarrollo para dar de comer", apostilló Mutunga.
SIN DINERO NO HAY ACUERDO
Finalmente, el asesor de políticas sobre cambio climático de Oxfam Internacional, Antonio Hill, esperó que entre las dificultades de lograr un acuerdo en Copenhague, uno de los aspectos más importantes es la financiación porque "sin dinero no hay acuerdo", a pesar de que, en su opinión, "se han hecho avances importantes".
Para ello, manifestó que del Consejo Europeo --que se celebra hoy y mañana en Bruselas-- "tiene que salir una oferta que sea adecuada" y que oscile entre los 22.000 y los 50.000 millones de euros, que son aproximadamente "la mitad de la financiación anual que haría falta a nivel mundial".
Finalmente, alabó el papel "líder" de la Unión Europea y su interés en conseguir un acuerdo multilateral para evitar que "los impactos se vuelvan catastróficos y los cambios en el mundo irreversibles". No obstante, lamentó que si los Veintisiete no sacan un acuerdo de financiación en este Consejo Europeo, las "posibilidades de Copenhague serán menores, porque se podrá hacer poca presión sobre Estados Unidos".