MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones conservacionistas WWF y Oceana han criticado el plan pesquero bianual para el Mediterráneo que ha aprobado este jueves el Parlamento Europeo, porque consideran que supondrá un "retroceso" para frenar la sobrepesca, ya que recupera ciertos subsidios y permitirá la pesca de arrastre en zonas de cría.
La Eurocámara ha aprobado el primer plan de gestión pesquera del Mediterráneo Occidental, que afecta a España, Italia y Francia e incluye reducciones del esfuerzo pesquero con el objetivo de combatir la sobrepesca de especies como merluza, cigala, gamba de altura y gamba roja, al tiempo que busca garantizar la sostenibilidad de la actividad.
Los eurodiputados han dado su visto bueno con 467 votos a favor, 62 en contra y 101 abstenciones al acuerdo alcanzado a principios de febrero con los Estados miembros, que todavía deben aprobar el reglamento para que pueda entrar en vigor veinte días después de su publicación en Diario Oficial de la UE.
Sin embargo, WWF alerta de que con este plan la Unión Europea está recuperando los subsidios que incrementarán la capacidad pesquera en aguas que ya están sobreexplotadas y advierte de que con este plan el combate a la sobrepesca en Europa adquiere "un rumbo insostenible y contradictorio" que amenaza el futuro de muchas pesquerías.
El plan aprobado contempla seis millones de euros para incrementar la capacidad de la flota pesquera o modernizar los antiguos barcos, con lo que WWF denuncia la vuelta de estos subsidios "perversos", suspendidos en 2004, precisamente en aguas sobrexplotadas como las del Mediterráneo.
La ONG destaca la paradoja de esta medida que contravendría otra decisión del Parlamento Europeo dirigida a destinar inversión pública en desguazar buques pesqueros. "La UE no debería destinar los 6.000 millones de euros que forman parte del Fondo Europeo Marítimo y Pesquero a prácticas que ponen en peligro nuestros mares ya sobreexplotados y el futuro de la pesca en Europa", opina el coordinador de Pesca de WWF España, Raúl García.
El Parlamento ha votado también destinar al menos un 25 por ciento de ese fondo a proteger y restaurar el medio ambiente marino y, en ese sentido, la ONG pide a los líderes de la UE que ese fondo apoye decididamente la transición a una pesca sostenible. A su juicio, esas medidas permitirían invertir en actividades que mejoren la sostenibilidad a largo plazo, como por ejemplo artes de pesca selectivas que minimicen las capturas accidentales y gestionar de forma eficaz las áreas marinas protegidas y la recogida de basura marina.
Sin embargo, García ve "positivo" que el futuro presupuesto de la UE apoye actividades que reduzcan la huella ambiental de las pesquerías, aborde la contaminación marina y aumente la eficacia de las áreas marinas protegidas, la reintroducción de estos subsidios pueden socavar muchos de estos esfuerzos. "Estas ayudas no pueden regresar bajo ninguna circunstancia", insiste.
Por su parte, la organización de conservación marina Oceana denuncia que este plan para el Mediterráneo permitirá el arrastre en zonas de cría de España, Francia e Italia, lo que contradice la Política Pesquera Común.
APLAZA HASTA 2025 LA SOSTENIBILIDAD PESQUERA
Además, la Eurocámara ha aprobado que la obligación de pesar de forma sostenible en 2020 establecido en la Política Pesquera Común se retrase hasta 2025. Por ello, Ocena lamenta las "vacilaciones políticas" a la hora de recuperar el mar más sobrepescado del mundo, restablecer las poblaciones de peces agotadas y restringir el arrastre de fondo.
La directora de Estrategia Política de Oceana Europa, María José Cornax, ha definido la pesca en el Mediterráneo como "el salvaje oeste" y alerta de que esta situación está llevando a una crisis medioambiental.
En todo caso, recuerda que las autoridades "saben" cuál es el camino de la sostenibilidad y ve en las "tímidas medidas" aprobadas este jueves un "paso necesario" pero insuficiente.
Para Oceana el plan aprobado es "un avance en la dirección correcta" porque por primera vez equipara el marco de gestión pesquero de España, Francia e Italia, pero cree que con estas medidas el Marenostrum está "lejos de librarse de la sobrepesca" y lamenta también que se relajen las restricciones al arrastre de fondo en zonas costeras.
"Calculamos que el esfuerzo pesquero de la pesca de arrastre podría aumentar hasta un 35 por ciento en España debido a la flexibilidad que introduce el Plan", estima la científica marina de Oceana, Marta Carreras, que pide al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que aplique el plan "de manera restrictiva".