NUEVA YORK 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha expresado su preocupación por el resurgimiento de los ataques de mortero en la capital de Somalia, Mogadiscio, que hasta el momento han provocado la muerte de cuatro personas, incluidos dos niños.
El portavoz del Alto Comisionado para los Refugiados, Adrian Edwards, ha mencionado el ataque que supuestos milicianos de Al Shabaab perpetraron el lunes en Mogadiscio, el primero desde que los grupos armados fueron expulsado de la mayor parte de la capital el pasado mes de agosto.
"Parece ser que el objetivo del ataque era un hostal donde se refugian las fuerzas pro gubernamentales, cerca del complejo del palacio presidencial, pero los morteros no alcanzaron su objetivo y cayeron en un pequeño campamento de desplazados internos en el distrito de Wardhigley", ha explicado a la prensa desde Ginebra.
En este contexto, ha instado a las partes a cesar los ataques contra la población civil, las agencias humanitarias y los lugares donde hay un alto riesgo de dañar a los civiles que viven en los alrededores. "El ataque del lunes presenta un riesgo inaceptable", ha subrayado.
Actualmente, las partes implicadas en el conflicto en Somalia no tienen una obligación jurídica internacional de reparar los daños causados a los civiles con sus ataques.
En un informe publicado el año pasado, ACNUR recomendó establecer un mecanismo para reconocer, investigar y responder por todos los ataques contra civiles, sobre todo por los que se traducen en muertos, heridos y daños a propiedades.