Reclaman mayor transparencia y un mayor control del destino final de las exportaciones
MADRID/BARCELONA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
Miembros de Amnistía Internacional (AI), Greenpeace e Intermón Oxfam se desplazaron hoy hasta el Congreso de los Diputados para entregar a los 48 diputados de la Comisión de Defensa, por los que pasará el proyecto de Ley de Comercio de Armas, el informe 'Comercio de Armas en España: una ley con agujeros', con el que pretenden demostrar que el proyecto impulsado por el Gobierno es "un colador" que permite la venta de armas a países con "conflictos armados", la "violación de los Derechos Humanos" o "situaciones de extrema pobreza". Estas organizaciones reclaman que la futura norma permita mayor transparencia, así como que propicie un mayor control sobre el destino final de las exportaciones.
Antes de entrar al Congreso de los Diputados, miembros de las tres organizaciones vaciaron a través de un colador gigante varias cajas con municiones rotuladas con el lema 'Made in Spain'. En un cajón estaban escritas algunas de las consecuencias del comercio de armas: 'violencia, pobreza, torturas, conflictos y matanzas' para representar su oposición al proyecto.
El informe analiza el proyecto de Ley del Gobierno, compara la legislación y la práctica en materia de comercio de armas de diez países. Además, hace recomendaciones concretas que deberían ser tenidas en cuenta por los grupos parlamentarios para reforzar la ley durante su tramitación y poner fin al comercio "irresponsable" de armas.
Según los datos recabados por las tres organizaciones, desde el año 2000 España ha incrementado progresivamente sus exportaciones de armas, llegando a situarse en este periodo entre el décimo y el decimoquinto lugar en el ránking mundial, con un porcentaje de ventas a países que no pertenecen ni a la UE ni a la OTAN del 38 por ciento. El portavoz de Intermón Oxfam, Ricardo Magan, afirmó estar "defraudado", después de llevar tanto tiempo esperando, por el texto final presentado por el Gobierno, a su juicio, "insuficiente". Es un proyecto "muy poco preciso" y "muy poco ambicioso", denunció.
"Lo vamos a presentar hoy a los 48 diputados de la Comisión porque son ellos los que tienen la responsabilidad de hacer de esta ley una ley que no permita transferencias a países pobres, países en conflicto o países donde se violan los Derechos Humanos", apuntó.
En este mismo sentido, la portavoz de Greenpeace, Mabel González, denunció que España "exporta armas a países como Colombia, Israel o Indonesia". "Si --el proyecto-- se aprueba tal y como está, muy pocas cosas van a cambiar", aseguró.
UNA "OPORTUNIDAD ÚNICA"
Los tres firmantes del informe mostraron a las puertas del Congreso su esperanza de que el trámite parlamentario sirva para acercar el texto a las leyes sobre regulación de armas vigentes en otros países como Gran Bretaña o Italia. "España tiene la oportunidad única de convertirse en el país con la mejor Ley de comercio de armas. Es cuestión de voluntad política", afirmó González.
"La ley debe garantizar más la transparencia en la información que se da públicamente y más control sobre el tipo de material que se vende, a quién se vende, por cuánto y cuál es el destino final de las ramas", demandó la portavoz de AI, Mónica Costa.
Para AI, países como Reino Unido, donde se informa trimestralmente de las licencias de exportaciones aprobadas o se exige un documento que certifique la no reexportación; Italia, donde los criterios para permitir la exportación están claramente tipificados; u otros países como Estados Unidos o Suecia tienen que servir de modelo para "mejorar el proyecto de Ley de Comercio de Armas".
ACTO EN BARCELONA.
Por su parte, en Barcelona activistas de Amnistía Internacional, Intermón Oxfam y Greenpeace denunciaron también que el proyecto de Ley perpetúa la situación actual, en que no hay control del país destinatario de las armas ni se informa de las transferencias autorizadas.
Dos decenas de personas escenificaron en la Ciudad Condal un acto simbólico en el que armas y balas caían en una caja identificada como país destinatario pasando por un colador gigante, que simbolizaba la Ley sobre el control del comercio exterior de material de defensa y doble uso.
El director de Intermón Oxfam en Catalunya y Andorra, Francesc Mateu, señaló que se están exportando armas a países como Israel o Colombia "sin ningún control" y que "el 60% de los destinos españoles no cumplen el código de conducta marcado por la Unión Europea (UE)", que, como no es de obligado cumplimiento, permite que la legislación europea sea en general "laxa".
Mateu exigió que haya un seguimiento de cuál es el verdadero país destinatario de las armas a través de un "rastreo" de armas previamente marcadas y recordó que las exportaciones más importantes de España son en municiones hacia el continente africano.
La presidenta de Amnistía Internacional en Catalunya, Montse Garriga, y la delegada de Greenpeace, Anna Rosa Martínez, pidieron, a su vez, más transparencia e información en el Congreso y se quejaron de que las armas llegan a países "donde se violan los derechos humanos o están inmersos en situación de pobreza o de guerra".
Mateu lamentó la falta "absoluta de información" a las entidades que llevan desde principios de los noventa trabajando por el control de las exportaciones de armas, ya que "las empresas armamentísticas han tenido más acceso al borrador de la ley que las ONGs".
España vendió armas a Colombia, Israel, Marruecos y China entre el período 2002 y 2005 por un valor de casi 65 millones de euros. Además, en los últimos años ha aumentado la venta a países de fuera de la UE y de la OTAN de un 11% en 2002 a un 38% en 2005.
