Los padres y madres que reducen la jornada laboral a 35 horas tienen menos probabilidades de promocionar
MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ampliación del permiso de paternidad de cuatro a cinco semanas ha cerrado la brecha de su uso en el sector privado y público y según el tipo de contrato. Antes de la entra en vigor de esta norma, los padres en el sector privado utilizaban menos este permiso que en el sector público y los trabajadores por cuenta propia menos que los asalariados.
Así lo pone de manifiesto el proyecto de investigación interuniversitario 'Fomento del equilibrio laboral y familiar desde las empresas' de Implica, que ha sido presentado este jueves durante la jornada 'La conciliación de los padres en las Pymes' que se ha celebrado en la Uned.
El proyecto, que ha estudiado durante los años 2015 a 2018 las condiciones familiares y empresariales que permiten a los hombres implicarse en los cuidados de sus hijos, refleja que los directivos continúan haciendo menos uso del permiso de paternidad que el resto, así como los padres con parejas no ocupadas.
"La ampliación refuerza el permiso de paternidad como nueva norma social. Cada vez más para ser un buen padre hay que tomarse el permiso", explica el estudio.
MENOR PROBABILIDAD DE PROMOCIÓN REDUCIENDO LA JORNADA
Durante la presentación, Teresa Jurado, una de las encargadas de elaborar el estudio, ha señalado que, según un experimento online realizado a 71 supervisores de 56 empresas, los padres y madres que reducen la jornada laboral a 35 horas tienen menos probabilidades de promocionar.
Esta penalización, ha añadido la experta, penaliza más a las madres, porque ellas usan esa medida de flexibilidad "mucho más que los padres". El estigma de flexibilidad, según el estudio, es mayor para la reducción de la jornada que para el teletrabajo.
"La flexibilidad temporal y espacial facilita la conciliación, pero los datos nos muestran que hay poco teletrabajo, aunque en él no hay brecha de género", ha asegurado Jurado.
En concreto, el estudio refleja que el 3,5 por ciento de los trabajadores y trabajadoras realizan de forma regular teletrabajo, por lo que no existe brecha de género en esta actividad. Sin embargo, hay muchas más mujeres que hombres que utilizan la reducción de la jornada laboral para el cuidado de menores, el 26 por ciento frente al 4,1 por ciento.
TELETRABAJO, ASUNTOS PROPIOS O SERVICIOS DE CUIDADOS
Además, la investigación destaca medidas empresariales que facilitan a los hombres la conciliación de empleo y cuidados a menores, como, entre otras, las que ofrecen tiempo y flexibilidad horaria sin una reducción de los ingresos; poder usar el permiso de paternidad intransferible y remunerado al 100%; o aquellas que permitan conciliar empleo y cuidados en caso de enfermedad o de vacaciones escolares, como el teletrabajo ocasional, una bolsa de días para asuntos propios o servicios de cuidados en la empresa para días festivos.
Durante su intervención, la directora del Centro de Estudios de Género de la UNED, Teresa San Segundo, ha defendido que hay que "proteger la salud de la madre para que se recupere y que el padre genere unas relaciones más estrechas con los hijos".
"Hay que fomentar la natalidad y hay que implicarse desde el punto de vista público para ello", ha subrayado San Segundo, destacando que el periodo inicial, tras el nacimiento, "debe ser conjunto".
En este sentido, ha señalado que el primer periodo del permiso "debe ser para la madre, para su recuperación" y ha rechazado compatibilizar el permiso del padre con el de la madre. "Hay que repartir el periodo del permiso para que se vea más protegido el interés del menor", ha precisado.
Por su parte, la decana de la facultad de Ciencias Políticas y Sociología, Consuelo del Val, ha lamentado que cuando se habla de conciliación "que suele transmitirse es la de una mujer que intenta ser excelente en el trabajo, en el entorno familiar, educando y cuidando de su hijo". "Es una carrera por intentar alcanzar lo imposible, que es la perfección", ha dicho.
Asimismo, ha reivindicado el papel que tiene la universidad "como agente, como motor de cambio". "Esta institución está al servicio de una sociedad que está en continuo cambio, que nos propone cada día nuevos análisis", ha explicado.
Tras la presentación de la investigación, se ha celebrado una mesa de debate en la que han participado tres padres de distintas empresas. "Los permisos en ambos casos deberían ser de un año. Eso es imposible, pero sí que se puede facilitar la conciliación", ha comentado Fernando Fanega, de Fanega&Pradas.
"Los autónomos somos los olvidados de la conciliación. Las prestaciones existen pero la mayoría de los autónomos que han cogido la prestación han trabajado a la vez", ha asegurado Fanega, al tiempo que ha criticado que las políticas de conciliación de los autónomos "son muy escasas".
