La UPC apunta que los recursos públicos de las universidades son "escasos" frente a la demanda del sector productivo
BARCELONA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La IV Conferencia Internacional de Barcelona sobre Educación Superior, que se celebrará hasta el miércoles en la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) realizará un "debate a fondo" sobre la aportación que debería hacer la universidad al mundo globalizado.
Durante la presentación de las jornadas hoy, el rector de la UPC, Antoni Giró, explicó que anteriormente las carreras eran un conocimiento que duraba "toda la vida", mientras que ahora deben ir ampliándose como parte de una "nueva manera de formación".
En este sentido, explicó que los grados y masteres que implica el nuevo Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) requerirán ampliar los años destinados a estudiar, pero también los recursos que reciben los centros universitarios, que consideró "escasos".
Así, explicó que aumentar las dotaciones es la "garantía de que el cambio se hace con calidad". Para ello, apostó por "rentabilizar" las investigaciones, dándoselas a conocer al sector productivo y creando patentes. "El conocimiento se genera igual, pero se pone a disposición de a quien le pueda interesar", propuso, pero añadió que los proyectos partirían siempre de la universidad, y no respondiendo a la demanda de empresas.
Según sostuvo, esta es una forma de rentabilizar los recursos que reciben, cumpliendo "la tercera misión de las universidades, la de ser un motor del desarrollo", aunque consideró que las aportaciones del sector privado deben ser una cantidad "adicional" al que reciben de las administraciones públicas.
REPLANTEAMIENTO DE LOS CONTENIDOS DE LA DOCENCIA.
Para Giró, más allá del EEES, en el que las universidades catalanas se integrarán plenamente en dos años y que supondrá un reconocimiento común de las titulaciones; "el mercado, las costumbres y la multiculturalidad del mundo globalizado" están suponiendo un "cambio de paradigma" que requiere "replantear" los contenidos que se les enseña a los universitarios.
Sobre este tema, la directora ejecutiva de la Red Global de Innovación Universitaria (GUNI en inglés), Cristina Escrigas, sostuvo que los estudiantes de nivel superior no sólo deben "incidir en el desarrollo económico", sino que debe aportárseles conocimientos como "ciudadanos" para que lleguen a ser "conscientes de las condiciones humanas, sociales y globales" en las que viven.
También destacó su papel en la "transformación social positiva", fomentando la creación de tecnología contra el cambio climático o investigando en cuestiones relacionadas con conseguir los Objetivos del Milenio, entre otros ejemplos. Así, lamentó las "brechas" sociales que se dan en el mundo, que cuenta con más información que nunca, pero con millones de personas que no pueden acceder a ella.
Según explicó, estos son algunos de los puntos que se tratan en el informe sobre los nuevos retos y roles emergentes para el desarrollo humano y social que se presentó hoy con motivo de la conferencia.
En este documento, que cuenta con un total de 52 autores del mundo académico, se recoge también que las universidades son "motores de la economía del conocimiento", pero deben estar también al servicio de los objetivos humanísticos y culturales de las personas.
En resumen, la universidad debe responder a las necesidades académicas de sus estudiantes; preservar el conocimiento y, a su vez, generar otro nuevo; internacionalizarse; ser motor del desarrollo económico y ser instrumento de movilidad social. Todo ello, en medio de un debate sobre si ésta debería ser un bien público o privado.
El jefe de los programas de graduado del Instituto de Desarrollo de Estudios de la Universidad de Sussex (Reino Unido), el investigador Peter Taylor, explicó que los centros de educación superior han llegado a un "punto crítico" en su evolución, y deben optar por abandonar los modelos de acumulación y memorización de conocimientos frente al desarrollo de las capacidades del alumno y la "transversalidad".
Taylor señaló que la globalización trae nuevas "necesidades y retos", por lo que hay que replantearse el papel educativo de la educación superior en el momento actual, que consideró "crítico y esencial" para el futuro. "Las universidades deben tener capacidad de cambiar en su papel de liderazgo, organización y gestión", señaló, y añadió que también deben tener "voluntad de llegar a la sociedad".
A las jornadas, asistirán, entre otros, la comisionada de Universidades de la Generalitat, Blanca Palmada; el director general de Universidades del Gobierno, Javier Vidal; el director de Educación Superior de la Unesco, Georges Haddad; el secretario de Estado de Universidades e Investigación, Miguel Ángel Quintanilla; y el presidente de la Fundación Cultura y Paz, Federico Mayor Zaragoza.
