Afirma que los que no lo suscriban no estarán perjudicados en sus derechos aunque tendrán "dificultades propias"
VALENCIA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Inmigración y Ciudadanía de la Comunidad Valenciana, Rafael Blasco, aseguró hoy que el 'compromiso de integración' que deberán suscribir los ciudadanos extracomunitarios que residan en la Comunidad, --recogido en la futura Ley de Integración--, "no es ninguna originalidad que no esté presente en los países más avanzados democráticos del mundo", entre los que citó a Inglaterra, Dinamarca, o Suecia, y sostuvo que no excluirá "absolutamente a nadie".
No obstante, consideró que sí que implicará "dificultades propias" para los inmigrantes que no lo firmen ya que "una persona que no hable ni valenciano ni castellano, y que no haga nada por aprenderlos, va a tener una dificultad objetiva para poder integrarse. Eso lo sabe cualquiera". "Estamos, por supuesto, con una integración que conlleve derechos y obligaciones", subrayó.
El conseller aseguró que en los países señalados la socialdemocracia "ha puesto en marcha" esta idea y lamentó que "ahora aquí hay algunos socialdemocratas de pacotilla, que se están sorprendiendo por algo que los países más democráticos del mundo ya lo han implantado".
Por ello, insistió en que "no estamos diciendo algo nuevo en el contexto más democrático del mundo sino facilitándoles instrumentos para que esta integración sea respetuosa con su forma de ser". Para Blasco, "hay culturas y culturas y todos sabemos que hay culturas en las que el respeto a los derechos humanos y la igualdad entre hombre y mujer no está comtemplado con la fimerza con la que queremos se haga".
Así lo indicó, a preguntas de los periodistas, antes de intervenir en el acto celebrado en las Cortes autonómicas con motivo del Día Mundial de la Educación. El conseller subrayó que se trata de un tema "que por mucho que se hable, no nos tiene que hacer perder la seriedad y la responsabilidad con el que hay que afrontar el fenómeno de la inmigración", al que calificó como "positivo y una fuente de oportunidades para continuar desarrollándonos económica, social y culturalmente".
Sin embargo, subrayó que está "generando determinadas tensiones y que es necesario regularizarlo y ordenarlo y, por lo menos, cada uno de acuerdo con sus competencias, intentar armonizarlo". Por ello, consideró que el "principal problema" es "la integracion de los inmigrantes en nuestro modelo de convivencia, en nuestro sistema democrático y que, además responda a la demanda de trabajo que tenemos en la Comunidad", que debe "procurar que los inmigrantes sean acogidos y respetados desde la diversidad cultural que nosotros entendemos" y darles "los instrumentos para que la integración se haga en unos térmionos convivenciales tal como nos corresponde".
"Las personas que vienen aquí no solamente viene a trabajar y a vivir sino que vienen a convivir en igualdad con los valencianos", dijo, y agregó que, por tanto, "tienen que saber que ésta es una comunidad con un idioma propio, una cultura propia, un modelo de conviencia basado en un sistema democrático donde el respeto a los derechos humanos es absolutamente incuestionable y donde todo este activo lo tienen que asumir los inmigrantes".
Blasco definió la iniciativa como "un instrumento que colocamos al servicio de las personas para que encuentren el apoyo de la administración para que su integración sea más rápida inteligente y natural" y agregó que apuestan "por una sociedad cohesionada que no entre en peligro como consecuencia de tensiones al no tener bien establecidos los procesos de integración".
"DIFICULTADES"
Preguntado por si algún inmigrante no quiere suscribir el contrato, señaló que esa persona "no estará perjudicada en sus derechos como persona o como ser humano" aunque tendrá "dificultades porque estará rechazando una integración que nosotros queremos poner al servicio de ellos como un instrumento de enriquecimiento de estas personas que vienen aquí".
"No como ninguna hostilidad bajo ningún concepto", matizó, e incidió en que "una persona que sepa que aquí tenemos unas tradiciones y una cultura propia, unas Cortes propias, una formulación democrática propia, tendrá más facilidad de integrarse si conoce esto que si no".
En esta línea, agregó que no le "entra en la cabeza que cuando la inmensa mayoría de los inmigrantes y extranjeros que hay en esta comunidad se han integrado de una forma natural, no entiendo por qué una persona no quiera saber que aquí tenemos un idioma diferenciado, una cultura propia, una historia propia, sino que la conozcan sencillamente porque eso es la base fundamental de integración", manifestó.
Blasco incidió en que se trata de "una forma de facilitarles la integración no para oponerse a ella" y consideró que "así lo ven la inmensa mayoría de los ciudadanos". En esta línea, hizo hincapié en que no habrá ningún tipo de medida para quienes no lo firmen porque los derechos humanos "son irrenunciables para cualquier persona". "No son discutibles y menos por un gobierno del PP que está dando un ejemplo destacado a niveles de intervención y participación", sostuvo.
