Eduardo Verástegui, productor de Little Boy y católico: "En Hollywood muchos viven en coherencia con sus principios"

Actualizado: jueves, 22 octubre 2015 18:55

MADRID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

El actor y productor mexicano Eduardo Verástegui, que acaba de producir la película 'Little Boy', de Alejandro Monteverde, y que llega a los cines españoles el próximo 30 de octubre de la mano de la distribuidora European Dreams Factory, ha apuntado que en el mundo del cine, como en cualquier otro, es difícil llevar una vida coherente pero ha asegurado que en Hollywood conoce a muchas personas que viven "en congruencia" con sus principios.

"En Hollywood y en cualquier parte del mundo, vivir una vida coherente, con principios, tratando de ser una persona íntegra, va a ser difícil", subraya Verástegui en una entrevista con Europa Press. Además, añade que "todos los días son batallas de cómo ser mejor persona, más sincero, cómo ayudar a tu prójimo, no juzgar. Y yo conozco mucha gente en Hollywood que todos los días lucha duro para vivir esa congruencia y eso me inspira a querer hacer lo mismo".

Para el actor, todas las personas están en una constante búsqueda personal, tratando de buscar respuestas, y explica que él estuvo buscándolas "en los lugares incorrectos, en la fama, el dinero, los placeres", hasta que la halló a los 28 años cuando dejó que el amor "gobernara" su vida y "que Dios fuera el centro".

A partir de ese momento, decidió crear una productora, Metanoia Films, con la que pretende llevar al cine "películas para toda la familia que hagan de este mundo un lugar mejor", como buscó con el film 'Bella' y ahora con 'Little Boy'.

La película que se estrena ahora es una historia americana en la que participa un elenco internacional formado por actores como Emily Watson y David Henrie, y en la que el protagonista es un niño de ocho años, (interpretado por Jakob Salvati), al que todo el mundo conoce como 'Little Boy' por su baja estatura. Cuando a su padre, que es su mejor amigo, le reclutan para luchar en la II Guerra Mundial, el mundo de Pepper se derrumba e inspirado por su héroe de cómic, hará todo lo posible para traer a su padre de vuelta a casa.

PREJUICIOS, MALTRATO, RACISMO

"Vamos a ver a través de la mirada de un niño de ocho años, cómo enfrenta los prejuicios, el maltrato, la discriminación, el racismo, cómo resuelve todos esos problemas poniendo el amor en acción", subraya Verástegui. Y aunque admite que los hechos suceden durante la II Guerra Mundial, considera que hoy en día, 70 años después, a pesar de los avances tecnológicos, siguen existiendo "los mismos problemas".

Por ello, cree que la pregunta que se debe hacer cada uno es: "¿Yo qué soy, parte del problema o parte de la solución?". "Espero que cada día más personas queramos ser parte de la solución porque si cada uno utiliza sus talentos para ayudar a los demás, sobre todo a los más necesitados, haremos de este mundo un mejor lugar", afirma.

En este sentido, el actor y productor dice que le gusta poner la cámara en historias positivas que permitan que los espectadores salgan del cine "no solo llenos de palomitas y dulces sino también de cosas positivas". Por este motivo, le costó encontrar el guión perfecto para la segunda película que iba a producir Metanoia Films y no se decidió hasta que llegó a sus manos una historia que le "apasionaba" y cuyo fin no era solo entretener.

Little Boy es el resultado de cinco años de trabajo resumidos en una hora y 40 minutos que tienen como objetivo "despertar la niñez que hay dentro de cada uno" pero que con la etapa adulta se pierde entre "miedos, inseguridades, guerras, corrupciones". Y, sobre todo, la película busca poner en valor tres elementos: "Fe, amor y esperanza".

HOMENAJE AL PADRE PRESENTE

También hace un homenaje al "papá presente, no ausente, que se preocupa de su familia" y que se ve reflejado en el padre de 'Little Boy', que "pasa tiempo de calidad con sus hijos" a diferencia de lo que ocurre en muchos casos hoy en día, según señala, de padres que "les dan a sus hijos muchas cosas materiales cuando lo que quieren los niños es pasar tiempo con ellos".

El film ya ha llegado hasta el Papa Francisco de la mano del propio Verástegui que se ha encontrado con él en tres ocasiones. Según recuerda, la primera y la segunda vez, el Pontífice le pidió que no se olvidara de los jóvenes y le regaló su solideo que guarda con gran recuerdo y la última, el productor le regaló una copia de su película y le dijo que esperaba que tocase su corazón.

En cuanto a los futuros proyectos, Verástegui adelanta que ya están "cocinando" un par de documentales sobre la importancia de la educación de los niños de la calle que no tienen herramientas para salir adelante. Durante 10 episodios, los espectadores podrán seguir la vida de Jesús, un niño de Perú al que encontraron en la calle, al que escolarizaron y que hoy en día está a punto de graduarse.