España destinó 1.300 millones a políticas de integración desde 2004

inmigrantes
Reuters
Actualizado: viernes, 18 diciembre 2009 11:00


MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno destacó este viernes, con motivo del Día Internacional del Inmigrante, la movilización de recursos por valor de 1.300 millones de euros en políticas de integración desde 2004.

En este sentido, mediante una Declaración del Día Internacional del Migrante, el Ejecutivo renovó, siguiendo la invitación de la ONU a los estados miembros para que intercambien experiencias y formulen medidas en defensa de los derechos de los migrantes, su compromiso con las políticas de integración bajo los preceptos de igualdad de trato y no discriminación, como mejor garantía de la preservación de esos derechos.

También señaló que durante el semestre de la Presidencia Española de la UE, que comienza el próximo 1 de enero, España albergará "importantes encuentros" en materia de Migración, como la Conferencia Ministerial de Integración que tendrá lugar en el mes de abril en Zaragoza o el Primer Debate Anual sobre Políticas de inmigración y asilo en el Consejo Europeo.

También valoró "el esfuerzo y la responsabilidad demostrados por las diferentes instituciones públicas, las organizaciones sociales y la ciudadanía española en general para construir una sociedad integradora en la que, de forma equitativa y alejada de prejuicios y estereotipos, se aboga por el respeto de los derechos y por el cumplimiento de los deberes de todos aquellos que residen en España".

Finalmente, apostó por una política en consonancia con los principios de que las migraciones ordenadas contribuyen al enriquecimiento tanto de las sociedades de salida como las de acogida y de que la legalidad y el control son la mejor garantía de derechos de quienes protagonizan los movimientos migratorios, así como en consonancia con los cambios experimentados por España en esta materia. Así, resaltó la nueva Reforma de la Ley Orgánica de Extranjería que entró en vigor hace cinco días y que, destacó, es "más garantista para los ciudadanos extranjeros de cuantas ha conocido España y que permitirá gobernar mejor la inmigración desde los principios de la responsabilidad y la cooperación".