El Gobierno italiano teme que lleguen más inmigrantes a la isla de Lampedusa

ROMA 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, ha señalado que el Gobierno "cree que un enorme flujo de inmigración potencial puede dirigirse a las costas europeas", mientras que el ministro del Interior, Roberto Maroni, ha subrayado que podrían llegar a las costas de Lampedusa alrededor de 80.000 inmigrantes clandestinos.

La isla de Lampedusa se encuentra al límite de su capacidad, ante la llegada de más de 5.000 inmigrantes tunecinos en las últimas semanas, un éxodo impulsado por las protestas que consiguieron la caída del régimen del presidente de Túnez, Zine al Abidine Ben Alí.

El Gobierno italiano ha declarado el estado de "emergencia humanitaria" ante la llegada masiva de inmigrantes clandestinos a sus costas y ha pedido ayuda para controlar la situación a la Unión Europea.

Precisamente, el ministro del Interior pidió este mismo lunes a la Unión Europea un crédito de 100 millones de euros para afrontar la situación de emergencia y exigió el apoyo de FRONTEX para la gestión de las instalaciones de acogida y el control de sus costas.

Maroni ha declarado en una rueda de prensa celebrada en Catania, Sicilia, que las autoridades italianas "comenzarán a transferir a los inmigrantes" a la esta isla y ha sostenido que hay "una fuerte colaboración" entre el Ejecutivo, la organización Cáritas y los servicios sociales.

Además, Maroni ha subrayado que "la emergencia humanitaria necesita un esfuerzo de todos para dejar aparte las polémicas" y ha reconocido que el Gobierno "está abierto a todas las propuestas que se presentan". Además, Maroni ha anunciado que mantendrá un encuentro con el alcalde de la isla de Lampedusa para "definir los detalles" de la situación.

El ministro ha pedido la ayuda del Ejército para controlar las estructuras en las que han sido acogidos los inmigrantes clandestinos que han llegado a las costas de Lampedusa. Según Maroni, el contingente del Ejército contará con 200 militares.

El titular de Interior ha visitado un posible centro de acogida para los inmigrantes en la provincia de Catania, un edificio alquilado al Gobierno estadounidense y en el que habitan las familias y los militares que se encuentran en servicio en la base militar que Estados Unidos tiene en el municipio de Sigonella.

El contrato de alquiler termina el próximo 31 de marzo, por lo que podría convertirse, según ha declarado Maroni, en una ciudad "de la solidaridad" que conjugue "seguridad y calidad".

El primer ministro, Silvio Berlusconi, ha estado presente en la visita al edificio, pero ha preferido no participar a la rueda de prensa sobre la inmigración, después de que se anunciara que la juez de instrucción Cristina di Censo ha decidido enviarle a juicio el próximo 6 de abril por prostitución de menores y abuso de poder.

ACNUR PRESTA ASISTENCIA

Por su parte, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha informado en un comunicado de que está trabajando junto a sus socios, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y Save the Children, en Lampedusa y en otras localidades del sur de Italia junto a las autoridades locales en la gestión de la reciente llegada de tunecinos.

Según ACNUR, la mayoría de los inmigrantes son varones jóvenes, pero se tiene constancia de la presencia de al menos 20 mujeres y más de 200 menores, la mayor parte no acompañados.

De las conversaciones mantenidas con los recién llegados se desprende de manera clara que, aunque la mayoría viene a buscar empleo, otros citan el miedo a la violencia, al colapso del sistema legal y del orden público en sus regiones de origen, precisa ACNUR.

A la agencia de la ONU le preocupa que los traficantes de personas en Túnez estén manipulando a los jóvenes con la promesa de una vida mejor en Europa. En este sentido, ha advertido de que, aunque el viaje es bastante corto, las mareas y las condiciones climatológicas adversas pueden convertirlo en peligroso. De hecho, tiene informaciones no confirmadas de que al menos cuatro inmigrantes se habrían ahogado.