El Gobierno turco asegura que quiere poner fin a la polémica con el Vaticano

Actualizado: lunes, 20 noviembre 2006 15:47

El líder ortodoxo Bartolomeo I llama a los turcos a no protagonizar "incidentes desagradables" durante la visita del Papa

ESTAMBUL (TURQUIA), 20 Nov. (por Ildefonso González, EUROPA PRESS) -

El máximo responsable de Asuntos Religiosos de Turquía, Ali Bardakoglu, mostró hoy su disposición a superar los problemas con el Vaticano a raíz de las polémicas declaraciones del Papa Benedicto XVI sobre el Islam, por lo que adelantó que no abordará el tema cuando se entreviste con el Pontífice en Ankara a finales de mes.

"Me gustaría mirar hacia delante. Si el Papa no menciona el asunto yo tampoco lo haré", declaró el gran muftí de Turquía en una entrevista a la revista alemana 'Der Spiegel'.

Bardakoglu fue uno de los primeros líderes musulmanes que condenó el controvertido discurso que Benedicto XVI pronunció el pasado 12 de septiembre en la Universidad de Ratisbona (Alemania), en el que relacionaba indirectamente la violencia y el odio con el Islam. El jefe de Asuntos Religiosos recibirá al Papa el próximo 28 de noviembre, día en que el Papa iniciará su viaje oficial de cuatro días por Turquía.

A pesar de ello, Bardakoglu reiteró sus críticas contra aquellas palabras del Pontífice, valorando que se trataron de "un ataque sumamente parcial contra las tres piedras angulares del Islam", esto es, la fe, el Corán y el profeta Mahoma.

Sin embargo, reconoció que el Islam está abierto a las críticas. "Estamos dispuestos a una discusión intelectual sobre la relación entre la fe y la razón, entre la religión y la violencia. El Islam y la racionalidad van juntas", consideró Bardakoglu.

"INCIDENTES DESAGRADABLES"

Mientras, el Patriarca Ecuménico Bartolomeo I, líder espiritual de los cristianos ortodoxos de todo el mundo, reclamó a la población turca que no protagonice "incidentes desagradables" durante la visita del Papa al país de mayoría musulmana.

Las autoridades turcas desplegarán un fuerte dispositivo de seguridad, con unos 16.000 policías, para garantizar la integridad física de Benedicto XVI, contra el que se temen ataques por parte de islamistas o de ultranacionalistas turcos.

En una entrevista al diario turco 'Sabah', estimó que el viaje del Pontífice es una "gran oportunidad" para Turquía y que aprovechará su encuentro con éste para trasladarle el ferviente deseo de Ankara de entrar en la Unión Europea.

En su opinión, si las protestas contra el Papa derivan en violencia, ello podría resultar perjudicial para Turquía dada la proximidad del Consejo Europeo que se celebrará en Bruselas a mediados de diciembre.

"El Papa tiene influencia en todos los países. Si hay incidentes desagradables, esto sería un tema en Bruselas en diciembre. Incluso aunque no sea a nivel oficial, hablarían sobre eso entre ellos", apuntó. Finalmente, anotó que la UE no debería seguir siendo un "club cristiano" y que el ingreso de Turquía enriquecería a las dos partes.