Greenpeace pide un impuesto a ultrarricos para frenar la crisis climática y lanza un videojuego sobre Elon Musk. - GREENPEACE
MADRID 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Greenpeace ha vuelto a pedir un impuesto a los ultrarricos para frenar la crisis climática. Esta vez, para hacerlo ha utilizado el lanzamiento de 'El Impuestómetro de los Multimillonarios", un videojuego que permite analizar cuántos impuestos paga cada persona en comparación con Elon Musk, que podría convertirse en el primer trillonario del mundo si los accionistas de Tesla aprueban su paquete de remuneración en la Junta General de la empresa la semana que viene.
"De esta forma, se muestra claramente lo injusto que es el sistema fiscal actual en la mayoría de los países y cómo este beneficia a los multimillonarios, principales responsables de la crisis climática por su consumo exorbitado y sus inversiones", ha denunciado la ONG.
Los ecologistas recuerdan que un impuesto global a multimillonarios podría generar 1,7 billones de dólares anualmente, que se podrían dedicar a financiar la prevención de inundaciones, el aire limpio, las ciudades verdes, la vivienda asequible y la protección de la naturaleza. La organización incide en que los gobiernos deberían "liberar esa magnitud de riqueza" en "proteger vidas y asegurar el futuro" en vez de permitir que una sola persona se convierta en trillonaria.
En este marco, la organización ha recalcado ante los gobiernos que sus compromisos climáticos y de protección de la naturaleza "deben comenzar por gravar la riqueza extrema". Por ello, les ha instado asentar las bases para una reforma fiscal global que acabe con el "escaqueo fiscal" de las grandes fortunas y corporaciones en las próximas negociaciones de la Convención Fiscal de la ONU en Nairobi (Kenia) del 10 al 18 de noviembre.
Además, ha solicitado por carta al Gobierno español que lidere una agenda de justicia fiscal y climática en las próximas citas internacionales de noviembre (por ejemplo, la COP 30 en Belém, Brasil) con un paquete de compromisos concretos para obtener mayores fondos para la acción climática y el bienestar global.
Para conseguirlo, considera "fundamental" promover impuestos globales y europeos a la industria fósil, lanzar un compromiso con un impuesto progresivo a los vuelos VIP y jets privados en España, apoyar las iniciativas brasileñas de transición justa y defensa de los bosques, acabar con las subvenciones fósiles, avanzar en la alianza creada en la Cumbre de Sevilla para gravar a los superricos y promover en la UE una postura ambiciosa y constructiva de cara a la Convención Fiscal de la ONU.