El juez De Castro defiende la reinserción de todos los presos, incluidos pederastas, que hay que rehabilitar "como sea"

Actualizado: martes, 14 julio 2009 18:26

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -

El juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, José Luis de Castro, defendió hoy que es posible alcanzar la reinserción social de todos los presos, incluso de los pederastas, a los que hay que intentar rehabilitar "como sea", aseguró. En todo caso, aconsejó para los penados por este tipo de delitos, "libertad vigilada", siempre y cuando exista "peligrosidad manifiesta" tras cumplir su condena.

Durante la conferencia de apertura del curso 'La rehabilitación social de nuestros presos: una tarea colectiva' --que tiene lugar en la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago hasta el próximo 17 de julio--, De Castro abogó por considerar al preso en general "como un ser humano" y no tanto como un delincuente para llegar a comprenderlo y hacer posible su rehabilitación social. "El delito no se justifica, pero el individuo puede ser modificado", argumentó el magistrado.

Por ello, De Castro apostó por ver más allá del recluso en sí al explicar que la ley penitenciaria había tenido presente durante los últimos años una serie de puntos con el objetivo de reinsertar socialmente a estas personas, entre los que destaca la consideración de su entorno social.

El contexto que rodea al individuo es, en suma, un factor básico que puede ayudar a comprender determinadas actitudes, por lo que el juez criticó que en el Código Penal las condenas sean las mismas para un "inmigrante que falsifica sus papeles" que para un "empresario que explota a sus trabajadores". "A mí me parece mucho más grave lo segundo", opinó el juez.

En el caso de la violencia de género, el magistrado reconoció que era necesaria una protección "muy grande" hacia las víctimas, puesto que no se sabe "hasta qué punto están mediatizadas" e incluso es frecuente que exculpen a sus propios agresores.

En definitiva, José Luis de Castro afirmó que "una sociedad que educa es una sociedad civilizada" y respaldó el voto de confianza hacia las personas presas al considerar su rehabilitación social una realidad, y no una mera utopía.

"YO ERA UN BALA PERDIDA"

Tras la conferencia del juez José Luis de Castro, tuvo lugar una mesa redonda con los testimonios de tres jóvenes presos del Centro Penintenciario de Teixeiro, como parte del curso 'La rehabilitación social de nuestros presos: una tarea colectiva'.

Los tres coincidieron en que su paso por la cárcel les había servido para rehabilitarse, incluso para poder continuar estudios que habían dejado inacabados años atrás. "Yo era un bala perdida --afirmó uno de ellos-- y estar en prisión me ha servido de mucho. En el centro, el que quiere, se inserta en la sociedad".

A través del desarrollo de distintas actividades y de la ayuda de los profesionales oportunos, los jóvenes afirmaron haber aprendido a "pensar las cosas dos veces antes de hacerlas". "Nos merecemos una oportunidad; hemos cometido un error, pero hemos cambiado", proclamaron ante medio centenar de personas que conformaban el público de este curso.