ROMA 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
Benedicto XVI ha celebrado la XV Jornada Mundial de la Vida Consagrada con la celebración de las vísperas en la Basílica de San Pedro y ha pedido a los consagrados que den testimonio "luminoso y coherente" del Evangelio frente al relativismo que afecta a "los valores fundamentales" de la sociedad.
El Pontífice ha declarado en su homilía que la sociedad vive hoy "una progresiva marginación de la religión de la esfera pública", sobre todo "las sociedades más desarrolladas", lo cual obliga a las comunidades religiosas a intentar que "el esfuerzo educativo sea siempre más atento y generoso" y que "la acción apostólica" de la vida consagrada "sea un empeño de vida".
Ante los miles de religiosos y religiosas de todo el mundo reunidos en el Vaticano, el Papa ha recordado que la vida consagrada es "una vida dedicada totalmente a la búsqueda del rostro de Dios, de sus signos y su voluntad" y ha subrayado la importancia de "escuchar la Palabra de Dios" para acoger "el Evangelio como norma de vida" en las comunidades religiosas.
Por otra parte, Benedicto XVI ha recordado que la Iglesia celebra este miércoles la Fiesta de la Presentación del Señor y ha afirmado que Ana y Simeón, que recibieron a Jesús en el Templo, son el símbolo de "la total donación de la propia vida" de todos los consagrados, que están llamados a "reproducir en la Tierra los trazos de Cristo virgen, pobre y obediente".
Precisamente, el Papa ha señalado que Ana y Simeón son los únicos que "descubren la gran novedad" y contemplan "la luz de Dios que viene a iluminar el mundo". Benedicto XVI ha destacado que la vida consagrada realiza "una experiencia singular de la luz de Dios" y está llamada al "testimonio profético" de la salvación del mundo.
Por último, Benedicto XVI ha invitado a los consagrados a manifestar en su vida cotidiana "la pasión por el Evangelio practicado como forma de vida" para anunciar a Cristo "a los más pobres y últimos de la Tierra" y ha confiado las congregaciones religiosas a la Virgen María para que la Iglesia sea "edificada en la santidad de vida" de los religiosos