Los Príncipes de Asturias concluyen su visita a Cuenca en el rebautizado "Parque de los Príncipes"

Actualizado: jueves, 11 septiembre 2008 17:47

CUENCA, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los Príncipes de Asturias concluyeron su visita a Cuenca con la inauguración de un monumento en su honor, situado dentro del parque que ha sido reubautizado como "Parque de los Príncipes", y acompañados de unos 800 conquenses, según indica la Policía Local.

Los Príncipes llegaron al "Parque Rústico", situado Villa Román, uno de los barrios periféricos de Cuenca, alrededor de las 13.00 horas, tras haber recibido en el Ayuntamiento las distinciones, tanto del propio Consistorio conquense como de la Junta de Cofradías de la Semana Santa.

Allí descubrieron la placa que renombra al parque junto al monumento en su honor, una obra del pintor y escultor Alberto Romero, llamada "Puerta de los Príncipes", realizada en mármol, pizarra y piedra caliza.

Según el autor, se trata de una esfera que simboliza el mundo, "que representa la tierra, saliendo de los oscuro, del barrio primigenio", y dos pilares "que simbolizan a la humanidad, creciendo hacia las estrellas". "Se trata de dos pilares, hombres y mujeres, la pareja, como los Príncipes, y que también forma un umbral hacia el futuro. De ahí el nombre de Puerta de los Príncipes", subrayó.

Por su parte el alcalde, Francisco Pulido, reconoció que el acto de inauguración del monumento ha sido "muy emotivo", y que siempre supondrá un recuerdo y una señal de la visita de los Príncipes de Asturias a Cuenca.

Al término de esta visita, el primer edil declaró a Europa Press que estaba satisfecho "porque todo se ha desarrollado bien, sin incidentes, y nos han felicitado tanto la Casa Real como todas las instituciones asistentes". Pulido confesó que sentía "una gran ilusión, por la visita de los Príncipes de Asturias, pero también un gran descanso porque todo haya salido tan bien".

El primer edil conquense afirmó que "es un privilegio para la ciudad que los Príncipes hayan aceptado la Alcaldía de Honor", porque "a partir de ahora serán grandes embajadores de la ciudad allá donde vayan", concluyó.

Tanto en el parque como en la Plaza Mayor, los Príncipes se mostraron cordiales con los conquenses que les aplaudían e interpelaban. Se acercaron a saludar y a estrechar manos, y contestaron a los piropos y preguntas del público.