PINTO (MADRID), 22 (EUROPA PRESS)
Los veinte detenidos, en Madrid, en la operación 'Prosa' de la Guardia Civil se hacían pasar por personal de seguridad para acceder a las empresas que posteriormente robaban y manipular las alarmas para que éstas no saltasen, según informó hoy una portavoz de la Guardia Civil, Mercedes Martín, quien aseguró que la banda actuó siguiendo este 'modus operandi' al menos en dieciséis de los más de 50 robos se le imputa al grupo en la zona Sur de Madrid.
El acuartelamiento de la localidad madrileña de Pinto mostró hoy parte del material incautado en los ocho registros simultáneos a las propiedades de la organización, desarticulada por agentes adscritos a la unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Madrid. Las televisiones de plasma y los ordenadores personales se mezclaron hoy con vehículos de gran cilindrada (BMW, Audi, Volkswagen...), relojes, PDA, armas, placas de policía simuladas, joyas y teléfonos móviles.
La operación -que permanece abierta- se saldó con la detención de catorce hombres y seis mujeres, con edades comprendidas entre los 20 y los 35 años. En los registros realizados en Madrid, Valdemoro, Colmenar de Oreja y Seseña se intervinieron catorce vehículos, tres motocicletas y más de una veintena de centralitas utilizadas para el robo de los vehículos.
Además, los agentes se incautaron de 60.000 euros en efectivo y 140 gramos de cocaína de gran pureza.
El grupo grupo -al que se le imputan hechos delictivos en Pinto, Móstoles, Parla, Fuenlabrada, Aranjuez, Alcorcón, Leganés, Getafe, Mejorada, Las Rozas, Coslada, Ciempozuelos y Boadilla- había alcanzado tal grado de operatividad que llegó a cometer hasta tres asaltos a la semana, para incautarse con todo tipo de material. La banda se especializó también en el "robo y maquillaje de coches" para su posterior venta en el mercado de segunda mano o a través de Internet, para lo que manipulaban el número de contador de los coches.
No obstante, la Guardia Civil detectó que, en los últimos meses, la banda había incrementado el número de robos a restaurantes de comida rápida, que asaltaban preferiblemente a última hora del domingo, cuando la recaudación era más elevada. Los detenidos cometieron unos veinticinco robos de este tipo en poco más de un mes.
Según Mercedes Martín, diez de los veinte detenidos han ingresado ya en prisión. La Guardia Civil considera que "el núcleo fuerte" estaba formado por cinco personas -M.M.A., el cabecilla; y R.S.B., D.D.A., J.M.A. y A.f.A.-, aunque el resto de detenidos están considerados "colaboradores necesarios".
INICIO DE LAS INVESTIGACIONES
Las investigaciones se iniciaron en enero, tras los robos en una empresa y en el concesionario 'Autos Juanjo', donde se sustrajeron hasta doce vehículos. En ambos casos, uno de los detenidos se hizo personó con uniforme e identificándose como personal de seguridad para manipular el sistema de alarma.
Este hecho hizo sospechar a los agentes de la Benemérita, quienes, en coordinación con la Policía Nacional, detectaron hasta dieciséis robos siguiendo este 'modus operandi', aunque, no obstante, también recurrieron a la realización de butrones en las zonas superiores de los locales que preveían robar.
Por su lado, la alcaldesa de Pinto, Miriam Rabaneda (PP), destacó la labor realizada por la Guardia Civil y la Policía local para desarticular esta organización. "Es triste -agregó-, pero nos alegramos de la labor realizada".