BARCELONA 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los accesos de carretera y ferrocarril al Monasterio de Montserrat tardarán varios días en estar activos, después del desprendimiento de piedras, que tuvo lugar a primera hora de esta mañana en una de las montañas de la emblemática abadía.
El suceso obligó a cortar la carretera BP-1121, que lleva al templo y que únicamente se ha abierto al tráfico para los vehículos que bajaban del monasterio. Si no se producen nuevos desprendimientos se espera que la carretera pueda estar abierta al tráfico mañana o el próximo jueves.
Durante todo el día, seguirán las tareas de limpieza de la carretera, cuyo asfalto ha quedado agujereado por los bloques de piedra, lo que obligará a que éste sea restaurado.
Por lo que se refiere al acceso vía tren por donde circula el servicio 'Cremallera', cabe señalar que tardará más días en ser reestablecido porque previamente hará falta retirar todos los escombros y arreglar la catenaria.
Los bloques de piedra caídos tenían un peso de 27 toneladas cada uno de ellos y han caído de unos 200 metros de altura a medio camino entre la carretera y el camino de los Degotalls.
En estos momentos, cuatro dotaciones de los Bomberos de la Generalitat siguen trabajando en el acceso a Montserrat y dos máquinas grandes y una pequeña están trabajando en la zona recogiendo las piedras que han quedado encima de la carretera. Por oto lado, también están saneando la montaña de donde han caído los bloques de piedra para asegurar que no se produzcan nuevas caídas.
Los técnicos del geológico también aseguraron que no hay peligro de nuevos desprendimientos. Se da la casualidad de que el año pasado, en concreto el día 29 de enero, se produjo un suceso similar en la misma zona.