VALENCIA, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Valencia cerrará la calle Palomar y derribará totalmente el edificio situado en el número 8 que se derrumbó hoy poco antes de las 10.00 horas de la mañana sin provocar heridos, según informó el concejal de Seguridad del consistorio, Miguel Domínguez, quien señaló que el siniestro se produjo como consecuencia de las obras "en fase de excavación" que se estaban realizando para construir un aparcamiento y un edificio en el número 10.
Dos familias residentes en el edificio siniestrado pudieron abandonarlo "segundos" antes de derrumbarse parcialmente al salir "rápidamente" del inmueble, de planta baja y tres alturas, tras notar que el suelo se movía. Esto evitó que el incidente, que se produjo sobre las 9.57 horas de hoy, causara heridos ya que, además, estas personas acababan de llevar a sus hijos al colegio.
Domínguez explicó que la pared interior de la finca se derrumbó, según las primeras hipótesis, como consecuencia de las obras llevadas a cabo para construir un aparcamiento y un edificio contiguo, en el número 10. Esta pared, que daba al patio interior, donde los obreros estaban trabajando, cayó y arrastró parte del inmueble, que se derrumbó.
El concejal indicó que las familias no podrán regresar a sus viviendas puesto que el Ayuntamiento declarará la ruina del edificio ya que los técnicos del consistorio han considerado, tras visitar el lugar, que "ya no reúne condiciones de habitabilidad". Por ello, dijo, "habrá que tirar todo el edificio y cerrar la calle Palomar mientras eso se lleva a cabo", anunció.
Ante esta situación, "la promotora y la constructora de las obras están buscando vivienda a las familias que habitaban el edificio afectado", con el fin de que también puedan trasladar allí todas las pertenencias que se hayan salvado, aseguró el edil.
Para ello, dijo Domínguez, el servicio de la Policía Local de ayuda X4 ha acompañado a los vecinos y se ha desplazado con los propietarios del inmueble afectado a ver el nuevo alojamiento que tendrán, "con lo que están intermediando entre la promotora y los propietarios para que todo se resuelva lo más rápido posible", incidió.
En este sentido, el propietario de la puerta 1 del inmueble derruido, Vicente Rico, expresó el "desconcierto general" que tienen en estos momentos, aunque se mostró "agradecido porque no haya habido daños personales porque nos podía haber pillado dentro tanto a los inquilinos como a los trabajadores, que no hacía ni cuatro minutos que se habían ido a tomar café", apuntó.
Rico dijo que han hablado tanto con personal de la constructora como de la promotora y que "se les ve afectados y con ganas de ofrecer soluciones". No obstante, dijo, "habrá que ver su comportamiento cuando se enfríe el tema", matizó. Por el momento, afirmó que no se explican "cómo ha podido ocurrir esto" aunque señaló que "había una grieta muy grande" en su casa desde el verano, cuando empezaron las obras. Al menos, continuó Rico, "ya están moviéndose para reubicar a las familias. Han tomado los teléfonos y ahora a esperar", concluyó.
"SE MOVÍA EL SUELO"
Por su parte, el presidente de Acció pel Patrimoni Valencià, Luis Martín, que tse acercó hasta el edificio y tuvo oportunidad de hablar con los propietarios, afirmó que en el momento del derrumbe "había dos familias, cuatro personas en total, que acababan de llevar a los niños al colegio y estaban en su casa, cuando han comenzado a notar que se movía el suelo y han salido corriendo". Mientras escapaban corriendo, según afirmó, "comenzó a caer la escalera y todo se ha hundido".
Martín aseguró que "han salvado la vida de milagro" y destacó que una joven salió con el labio "sangrando" y el estado de "crisis nerviosa" que sufrían los afectados. "Si hubieran estado los niños y no hubiera dado tiempo a salir hubiera sido un desastre", añadió.
Además, "justamente acababan de salir a almorzar los trabajadores del entresuelo" que, según apuntó, "también se han salvado por eso".
En ese sentido, un vecino de la zona, José Perales, declaró que estaba en el patio de su casa, que oía como la máquina de excavaciones sacaba tierra aunque al rato notó que se paró y que los trabajadores se fueron a almorzar.
Apenas transcurrieron unos minutos, dijo, oyo "un ruido grande y una nube de polvo". Al asomarse, pudo ver que "se había caído la casa de al lado donde estaban haciendo la cimentación". "Si los obreros llegan a tardar cinco minutos más en salir de ahí, les pilla la máquina abajo sacando tierra" afirmó.
