Uno de los detenidos presuntamente abusó de una de las chicas porque era nueva y "había que probarla"
LÉRIDA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional desarticuló el 14 de septiembre en Lérida una organización dedicada al tráfico de mujeres para su explotación sexual, tras una operación desarrollada en siete meses que se inició con la detención en Letonia de un miembro del grupo.
Según informó hoy el Cuerpo, los seis detenidos en la ciudad de Lérida y Ponts regentaban un club de alterne de esta última localidad, en el kilómetro 113 de la carretera C-14, al que trasladaban a las víctimas desde Rusia y otros países eslavos en viajes de cerca de diez días.
Las víctimas eran captadas por contactos del grupo en países del este de Europa que, primero, realizaban un estudio previo de las mismas apuntando preferentemente a jóvenes de clase social media-baja y con familiares a su cargo, para abusar de su situación personal.
La organización en España pagaba por este servicio y el posterior viaje una cantidad que oscilaba entre los 2.000 y los 3.000 euros por cada nueva víctima, cifra que más tarde se convertía en deuda y que era utilizada para la explotación sexual de estas mujeres.
El dinero que cobraban las prostitutas por sus servicios --55 euros por media hora-- era retenido por la 'madame', que lo guardaba en sobres individualizados, y era quien llevaba la cuenta de cuánto iban devolviendo, restándoles los gastos de manutención, alojamiento, y las multas que les hacían pagar cuando no seguían las consignas de la organización.
Las rutas que seguían las víctimas atravesaban diferentes regiones y suponían varios días hasta alcanzar Lérida. Una de éstas partía de la zona rusa de Vladivostok para llegar en tren hasta Moscú --en el Transiberiano, el viaje dura unos siete días-- y desde allí volar hasta Varsovia, acceder al territorio Schengen mediante un visado de turista y trasladarse en avión a Barcelona, desde donde eran llevadas a Ponts.
Según fuentes policiales, las mujeres eran tratadas como un "producto", que podían ser compradas, vendidas, y que "caducaban", porque al cumplir los 28 años eran consideradas mayores.
ABUSAN DE UNA DE ELLAS
Uno de los detenidos presuntamente abusó de una de las prostitutas que acababa de llegar a Barcelona, a quien obligó a pasar por su domicilio porque "a la nueva había que probarla".
Los seis arrestados en España son presuntos autores de los delitos de asociación ilícita, favorecer la inmigración ilegal y relativos a la prostitución. La Policía intervino en el club de alterne y un domicilio registrado 9.485 euros en efectivo, ordenadores portátiles, una cámara de fotos y documentación relativa a las actividades del club.
El jefe de la organización es Víctor B., procedente de Letonia; y los otros cinco detenidos son de Rusia (3), Bielorrusia y Ucrania, de los cuales dos ya están en prisión.
En el prostíbulo trabajaban en el momento de la operación siete mujeres: la 'madame', otras cinco prostitutas, y la mujer de confianza, que era quien informaba a los proxenetas de la manera de trabajar de sus compañeras, y fueron detenidas seis, de nacionalidad rusa, por inmigración irregular.
