ALMERÍA, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
Cuatro de los once heridos registrados en la explosión que ayer dejó en situación de "siniestro total" la fábrica de perfumes de la compañía Briseis S.A. en Benahadux (Almería), permanecen en estado grave con pronóstico reservado en la Unidad de Grandes Quemados de los hospitales Virgen del Rocío (Sevilla) y Carlos Haya (Málaga), según informó la Delegación del Gobierno andaluz en una nota.
Se trata de tres mujeres y un varón de 18 años, quien presenta quemaduras de segundo y tercer grado muy graves en más del 70 por ciento de la superficie corporal. Otra herida, una mujer de 49 años, sufre las mismas lesiones y su pronóstico es muy grave. Ambos fueron evacuados en helicóptero en la noche de ayer al centro sanitario hispalense.
En el Hospital Regional de Málaga evolucionan de las quemaduras en brazos, piernas y pies otras dos trabajadoras de la planta química, de 33 y 41 años, aunque su estado continúa siendo grave tras su ingreso a las 03.15 y las 03.30 horas de hoy.
La Delegación de Salud de la Junta en Almería informó, asimismo, de que el resto de las 12 víctimas de la deflagración atendidas en el complejo hospitalario de Torrecárdenas y el centro de Alta Resolución de El Toyo ha recibido el alta médica.
En concreto, siete pacientes, entre ellos dos mujeres de 27 y 34 años con quemaduras leves y un hombre de 39 años con las mismas lesiones, fueron dados de alta en la noche de ayer, mientras que un octavo, cuya identidad no ha trascendido, ha recibido el alta facultativa en la mañana de hoy.
Al lugar del siniestro, ocurrido pasadas las 15.55 horas de ayer se desplazaron una UVI móvil del 061, que actuó de retén hasta que se dio por controlado el fuego derivado de la explosión, así como dos ambulancias de Benahadux y Alhama, el equipo médico del centro de salud del primer municipio y una Unidad de Pacientes Críticos.
En un primer momento, los servicios de emergencias atendieron a cuatro personas, dos de ellas con una crisis de ansiedad, mientras que a otros cuatro pacientes los evacuaron por medios propios hasta el complejo hospitalario de Torrecárdenas en Almería aquejados de inhalación de humos.
