MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Tres ciudadanos chilenos fueron detenidos en Madrid como presuntos implicados en al menos diez robos que habrían cometido por el procedimiento del 'cogotazo' contra clientes de entidades bancarias. Los ladrones, que se comportaban de forma muy violenta si la víctima se resistía, fueron arrestados cuando se repartían el botín de un asalto perpetrado en Torrejón de Ardoz.
Hasta el momento se les atribuyen nueve robos cometidos en distintos puntos de la Comunidad de Madrid y uno más en la localidad de Illescas (Toledo). Dos de los detenidos han ingresado ya en prisión por orden judicial, informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
La operación ha permitido intervenir tres navajas de grandes dimensiones y una pistola de descargas eléctricas que empleaban para cometer sus robos, y recuperar tres vehículos que habían sustraído para huir tras los asaltos.
La investigación, iniciada a finales del pasado enero por parte de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) Central de la Comisaría General de Policía Judicial, se centró en un grupo de delincuentes de origen sudamericano especializado en cometer robos con violencia por el método del 'cogotazo'.
Tras determinar la participación de la banda en varios asaltos, se estableció una estrecha vigilancia sobre sus miembros: Luis Alberto R.B., Christian Alexis A.A. y Moisés M.M., cabecilla esté ultimo del grupo.
El método del 'cogotazo' consiste en que alguno de los ladrones se introduce en el interior de una sucursal bancaria e intenta detectar a alguna persona que haga una operación elevada de reintegro de efectivo. Una vez elegida la víctima, el delincuente sale del establecimiento y avisa al resto de componentes del grupo quién es el objetivo, bien mediante una llamada telefónica o a través de gestos previamente concertados, indicándoles el lugar donde porta el dinero que acaba de retirar. Después, siguen a la víctima hasta un lugar idóneo donde, mediante violencia o intimidación con armas blancas, se apoderan del dinero.
En el momento de la detención, el grupo se estaba repartiendo el dinero obtenido en un robo con violencia que acababa de cometer contra una cliente de una sucursal bancaria de la localidad de Torrejón de Ardoz.
