MÁLAGA 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Marbella (Málaga) han desarticulado un grupo de delincuentes de origen español especializado en cometer robos con fuerza en domicilios y establecimientos de la zona marbellí de Nueva Andalucía. En la operación se detuvo a siete personas, tres de ellas menores de edad, como presuntas responsables de un total de 41 robos con fuerza, en los que sustrajeron numerosos efectos, entre ellos joyas, electrodomésticos, aparatos de telefonía y elementos de informática.
Las investigaciones policiales comenzaron a raíz de recibir varias denuncias sobre robos con fuerza perpetrados en viviendas y en establecimientos de la zona de Nueva Andalucía, según informaron desde la Comisaría Provincial en un comunicado.
Se estableció un dispositivo con el fin de localizar, identificar y detener a los autores, centrándose, inicialmente, las pesquisas en una zona próxima al lugar de los hechos, y que finalizaron a finales de enero con la detención y puesta a disposición judicial de los presuntos responsables.
UN CAMIÓN LLENO DE ELECTRODOMÉSTICOS
Durante la operación, denominada 'Bosch', se llevaron a cabo cinco registros domiciliarios, en los que se intervinieron numerosos efectos, entre ellos el equivalente a un camión lleno de electrodomésticos, procedentes en su mayoría de los robos denunciados y que fueron entregados a sus propietarios. Por parte de los investigadores se continúan practicando gestiones con aquellos efectos intervenidos que aún no han sido identificados.
El grupo elegía domicilios o establecimientos en zonas próximas a la urbanización donde ellos residían, para de este modo asegurar un traslado rápido de los efectos que robaban --teniendo en cuenta que principalmente eran objetos pesados como lavavajillas, lavadoras, vitrocerámicas, televisores, etcétera--.
Para acceder a los inmuebles, los ahora detenidos forzaban puertas o ventanas empleando herramientas como mazos, palancas o cortafríos entre otros y mientras uno de ellos se quedaba vigilando en el exterior para alertar sobre la posible presencia de policías o de testigos, los otros accedían al interior.
Así, el grupo contaba con una persona --un vigilante que trabajaba en una de las urbanizaciones en las que se llevaron a cabo los robos-- que daba la información sobre la accesibilidad, horario más conveniente y material u objetos que había en el interior de los inmuebles.
Los detenidos son F.L.S., de 59 años; J.D.B.L., de 22; J.M.B.L., de 19; R.Z.S., de 18, y los tres menores, según indicó la Policía Nacional en el citado comunicado.