Se elevan a siete a los policías intoxicados por humo en el incendio de una vivienda en Castellón

CASTELLÓN 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Policía Nacional ha cifrado en siete el número de agentes que tuvieron que ser asistidos por los servicios sanitarios tras intoxicarse por inhalación de humo en el incendio que se declaró esta madrugada en una vivienda de la calle Lepanto de Castellón, en el que también fueron atendidos los tres menores que se encontraban en su interior, según informaron en un comunicado fuentes policiales.

La Sala del 091 recibió a las 01.30 horas numerosas llamadas, en las que se informaba de que se estaba produciendo un grave incendio en una vivienda en la Plaza del País Valenciano de la ciudad. A la llegada de las dotaciones policiales, se compró que efectivamente se estaba produciendo un incendio en una vivienda del numero 2 de la calle Lepanto, en cuyo interior todavía podían encontrarse sus moradores.

Según indicaron, se apreció gran cantidad de humo que salía de la vivienda afectada, así como fuerte olor a quemado en todo el inmueble, por lo que, ante la gravedad del incendio, las dotaciones acordonan la calle Lepanto e iniciaron la evacuación de todos los vecinos desde el piso quinto hasta el primero.

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía llegaron a la vivienda afectada, a los que cortó el paso un menor, al que acompañaban sus dos hermanos, los cuales mientras, mientras eran evacuados, informaron que en el interior de la vivienda se encontraban sus padres y que no respondían.

Ante la peligrosidad del incendio y el grave peligro para la vida de las dos personas que podían estar en el interior de la vivienda, y en vista de que los bomberos aún no habían llegado, entraron primero unos policías provistos de un extintor, se dirigieron a la habitación de donde parecía provenir el fuego y emplearon el extintor para sofocar el incendio. Tras registrar el interior de la habitación , no encontraron a nadie en su interior.

Los demás policías entraron en la vivienda a gatas, utilizando sus linternas para ver y turnándose unos a otros sucesivamente, con la finalidad de registrar toda la vivienda y rescatar a los moradores que, según los menores, estaban en la casa.

Los policías estuvieron durante un periodo de tiempo en la vivienda registrando todas las habitaciones y abriendo incluso los armarios por si las personas a las que buscaba se hubiesen escondido en ellos huyendo del humo y se encontrasen desmayados a consecuencia de la inhalación de CO2, aunque se descartó que hubiese alguien a excepción de un pequeño perro que también fue rescatado con vida.

Una vez que llegaron al lugar los bomberos se procedió a la extinción del incendio y a una inspección más exhaustiva del domicilio, descartando definitivamente que en el piso quedase alguien. Los menores informaron que son hermanos, de nacionalidad polaca, de 17, 15, y 12 años, y que sus padres tenían que estar en casa.

La policía, a través de un amigo de la familia que se acercó al oír el ruido de las sirenas, logró contactar con los padres de los menores, quienes llegaron poco después y señalaron que el padre estaba todavía en una reunión de trabajo y que la madre, como los hijos estaban durmiendo, los dejó solos un rato para ir a recoger a su esposo a la salida de la reunión.

El incendio se había iniciado en la habitación de matrimonio, siendo su origen algún fallo en el televisor que se encontraba en dicha habitación, que fue la única afectada por las llamas, aunque toda la casa se encontraba con las paredes y el suelo negros por el humo, así como la escalera comunitaria.

Una vez que los bomberos dieron el incendio por concluido y controlado y el edificio se ventiló, los vecinos de los demás pisos pudieron regresar a sus domicilios, según las mismas fuentes.