Fago.- El presidente de La Jacetania cree que fue un crimen por encargo debido a cuestiones municipales

Actualizado: miércoles, 17 enero 2007 14:55

FAGO (HUESCA), 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Comarca de La Jacetania, Alfredo Terrén, considera que el móvil del asesinato de Miguel José Grima, de 50 años, y alcalde de Fago, puede responder a cuestiones municipales, y que el autor o autores le quitaron la vida por encargo. Los habitantes de la zona siguen conmocionados por lo sucedido, "están expectantes, a ver si los hechos se esclarecen y se logra detener al culpable o culpables".

Terrén apuntó que "no me encaja que haya gente tan malísima en nuestro Pirineo, no concibo que el autor sea un vecino de Fago". El responsable de La Jacetania opina que el asesinato de Grima, alcalde del PP, ocurrido en la noche del pasado viernes, no obedece a cuestiones económicas ni a oscuros negocios. "Miguel vivía de su trabajo, era una persona normal, tenía una casa rural con la que se mantenía e imagino que tampoco le sobraría el dinero. Incluso alguna vez me había comentado que si sabía de algún trabajo se lo dijera. Sí que tenía problemas con temas municipales", añade.

Alfredo Terrén cree que Grima no andaba metido en extraños negocios ni que su muerte esté relacionada con "dinero negro" o algo parecido. "Puede que alguien pagara a otras personas para acabar con él, eso existe, hay gente que está dispuesta a matar por encargo".

En la tarde del viernes, Grima estuvo en Jaca, en una reunión de la Comarca, se despidió normalmente y cogió el coche para regresar a Fago. Según la investigación, en la carretera de Majones a Fago, de camino se debió ver obligado a detener su coche, que apareció al día siguiente con cristales rotos, porque había unas piedras que le impedían el paso. El alcalde recibió en el pecho varios impactos de escopeta de postas.

Unos testigos afirman que esa misma noche vieron un coche en la carretera, en cuya cuneta fue encontrado el cuerpo al día siguiente, y que cuando se acercaron a ver si ocurría algo, un hombre que llevaba una linterna les indicó que no pasaba nada, que continuaran. Terrén subrayó que "estos testigos vieron el coche parado en la carretera".