Una operación de Policía Nacional dirigida desde Pamplona desarticula una organización dedicada a estafar a traficantes

Actualizado: lunes, 23 junio 2008 16:18

PAMPLONA, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Madrid y en León a J.F.P.G., de 22 años, D.A.E., de 35 años y J.J.M.C., de 41 años, los tres de nacionalidad colombiana y domiciliados en localidades cercanas a Madrid, desarticulándose una organización dedicada a estafar a traficantes de sustancias estupefacientes. La operación estaba dirigida jurídicamente por el Juzgado de Instrucción número cuatro de Pamplona.

En la operación se intervinieron 1.070 gramos de cocaína, 10.000 gramos de cocaína simulada, una balanza de precisión, dos prensas para elaborar paquetes de cocaína, 5.200 euros en efectivo, dos pistolas simuladas de fogueo, dos cartuchos de 9 mm corto y cartuchos de fogueo.

Según informó la Policía Nacional en un comunicado, la operación se produjo como resultado de las diligencias de entrada y registro practicadas en cuatro domicilios en distintas localidades de Madrid, apoyados en el operativo policial por agentes de la Brigada Central de Estupefacientes y de la Comisaría Provincial de León.

Las investigaciones se iniciaron a finales del pasado año y a través de la misma se pudo conocer la actividad de estas personas. La manera de operar que llevaban a cabo era la misma que normalmente utilizan los narcotraficantes, adoptando numerosas medidas de seguridad, utilizando vehículos de alquiler o poniendo sus bienes a nombre de terceras personas.

Todas estas actividades estaban encaminadas a evitar ser descubiertos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y también para que los traficantes estafados no pudieran localizarlos y así tomar represalias.

El 'modus operandi' consistía en localizar a personas que quisieran comprar grandes cantidades de cocaína tanto en España como en cualquier país de la Unión Europea. Una vez localizado el comprador, se realizaban citas en restaurantes de lujo a donde acudían con vehículos de alta gama y prendas de vestir de alto precio para dar buena impresión a los compradores.

En esas citas les ponían en contacto con los 'ganchos' que tenían en Colombia, esto es, personas de su confianza que vivían en Colombia simulando ser los propietarios de la droga y que participaban del embuste llevándose a cambio un porcentaje de las ganancias.

Una vez que el comprador 'mordía el anzuelo' y encargaba la droga, se concertaba una cita en localidades con bastante población, distintas al lugar de residencia de los estafadores, normalmente en centros comerciales y lugares concurridos para en el caso de que el comprador descubriera el engaño evitar su reacción dado que son lugares muy concurridos, con numerosos elementos de vigilancia y seguridad.

En caso de que el narcotraficante exigiese una prueba de la droga, invitaban a este a subir al vehículo de los estafadores. El comprador se sentaba en el asiento del copiloto al lado de uno de los estafadores, mientras que el encargado de mostrar la droga se sentaba en la parte de atrás. Este cogía un paquete de la droga falsa, perfectamente empaquetado como si se tratara de auténtica cocaína, y lo abría haciendo una incisión con una navaja.

Aprovechando un despiste del comprador o distrayendo su atención, daban el 'cambiazo' y le mostraban unos gramos de verdadera cocaína. Si la operación salía bien y el comprador quedaba satisfecho con la prueba llevaban a cabo la transacción, en la que solían cobrarles a los estafados la mitad de la droga encargada. Una vez con el dinero en su poder desaparecían rápidamente para que una vez fuese descubierto el engaño, estar lejos del alcance de sus víctimas.

Esta actividad la venían realizando desde unos diez años atrás y les reportaba elevados beneficios como se deduce de los bienes que poseían, tales como chales, vehículos de alta gama, etc. Los detenidos fueron puesto a disposición de la Autoridad Judicial junto al atestado policial instruido.