La policía evita el suicidio de un joven leonés que había amenazado con hacerlo a través de internet

Actualizado: lunes, 29 enero 2007 16:00

El suicida había permanecido durante catorce horas seguidas participando en un juego on-line multijugador

LEON, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional evitaron el suicidio de un joven leonés de 19 años que había amenazado con quitarse la vida tras jugar durante catorce horas ininterrumpidas a un juego on-line multijugador. El joven, vecino de la capital leonesa, había manifestado a través del chat su intención de suicidarse, tras realizar en una de las fases del juego una 'petición' a uno de los 'Maestros del Juego' que no había sido concedida, según informaron a Europa Press fuentes policiales.

Los agentes de la Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía recibieron a las 11.30 horas del pasado día 16 una llamada procedente de una empresa, con sede en Francia, dedicada a dar servicio y atención al cliente de un conocido juego on-line multijugador. Comunicaban que tan sólo media hora antes uno de los jugadores había manifestado a través del chat que se iba a suicidar. El joven había estado jugando durante 14 horas seguidas y de él sólo aportaron el nombre con el que se identificaba en el juego.

A partir de esos datos, los investigadores lograron averiguar que la IP correspondiente a ese usuario pertenecía a un proveedor de telefonía e Internet de España. Ante la posibilidad de que cumpliera su amenaza, se solicitó de manera urgente la colaboración de la empresa de telefonía, que comunicó que la línea pertenecía a un abonado de León.

Todos los datos se pusieron inmediatamente en conocimiento de la Comisaría Provincial de León, que desplazó hasta el domicilio a varios agentes para comprobar si alguien se encontraba en peligro. Tras contactar con el titular del inmueble, éste les dijo que, efectivamente, su hijo de 19 años era quien había estado jugando a través de Internet y había amenazado con suicidarse y que, por fortuna, se encontraba bien.

Tan sólo tres horas después de la primera llamada recibida desde Francia, los investigadores lograron identificar el lugar donde se podía encontrar el joven en peligro y evitar que cumpliera sus amenazas.