Un preso del Psiquiátrico de Alicante ataca a una enfermera, a la que estranguló hasta dejarla inconsciente

Actualizado: lunes, 12 enero 2009 13:31

UGT pide el cese del gerente del centro ante la falta de seguridad de los trabajadores que atienden a estos internos peligrosos

ALICANTE, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

UGT reclamó hoy el cese del gerente del Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Fontcalent, en Alicante, ante la falta de seguridad que registra este centro, donde el pasado 7 de enero un interno agredió a una enfermera y la estranguló hasta dejarla inconsciente, según explicó hoy el delegado de FSP UGT en Alicante, Santiago Rodríguez.

Los hechos se produjeron sobre las 18.00 horas del pasado día 7 de enero, cuando la enfermera afectada se encontraba en un despacho, y fue abordada por un interno --que se había escapado de la consulta situada en la planta inferior--, que le pidió que le dispensara metadona.

Ante la negativa de la enfermera, el preso abandonó el despacho y esperó a que ella saliera de la habitación, momento que aprovechó para atacarla por sorpresa apretándole el cuello hasta que la víctima perdió la consciencia, según UGT.

A continuación, el interno esperó a que se recuperara, y le exigió de nuevo la metadona, a lo que la profesional simuló acceder. La víctima le hizo creer que buscaba una llave hasta que un educador acudió junto a ellos, y la enfermera pudo huir del lugar.

Para UGT, lo ocurrido pone en evidencia la falta de seguridad que padecen los profesionales que trabajan en el Psiquiátrico Penitenciario de Fontcalent, construido para atender a unos 250 internos "pero que en la actualidad cuenta con más de 400 presos".

A esta situación de hacinamiento, se suma, según resaltó, el hecho de que esta población reclusa esté compuesta por personas de "gran peligrosidad", como asesinos múltiples que requieren tratamiento psiquiátrico. No obstante, en opinión del delegado de UGT en el centro, la dirección "parece que sólo hace hincapié en la reclusión, más que en el tratamiento psiquiátrico".

En este sentido, Santiago Rodríguez resaltó que el personal del centro desconoce el grado de peligrosidad de cada interno, lo que hace que "uno no sepa con quién está tratando cuando alguien sufre un brote", como es el caso del recluso que agredió a la enfermera, que está en un grupo de especial peligrosidad.

Además, UGT puso de manifiesto que, de acuerdo con la relación de puestos de trabajo del centro, debería haber cinco psiquiatras en plantilla, cuando realmente "sólo hay uno en plantilla, dos con contrato a tiempo total, y dos a tiempo parcial". De igual modo, serían necesario cubrir una decena de puestos de auxialiar de enfermería, y otros 8 ó 10 de limpiador, entre otras carencias de personal.

El Centro Psiquiátrico Penitenciario de Alicante es el mayor de los dos existentes en todo el país, el otro está ubicado en Sevilla y sólo tiene la capacidad para un centenar de internos, según apuntó Santiago Rodríguez, quien destacó que en Fontcalent se encuentra un gran número de asesinos con trastornos mentales, como es el caso de la doctora de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid que, en 2003 mató a tres personas e hirió a otras seis, recordó.