MADRID 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la FAPAE, Pedro Pérez, denunció hoy que España sea "la vergüenza" del mundo en materia de piratería en Internet. Las medidas a tomar a este respecto, señaló, "no deben ser generalizadas" pero sí contra "los traficantes de derechos ajenos" que "desvalijan al legítimo propietario". Sobre las subvenciones al cine español, pidió no echar sobre los hombros del sector esa "dura carga", ya que no es el único subvencionado en España. También lanzó una reflexión: "el talento creativo está en la calle y no está, no ha estado ni estará en las televisiones".
Pérez, que participó en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, señaló que Internet debe hacer reflexionar al sector del audiovisual. "La piratería es una amenaza nueva de la revolución digital y pone en peligro todos los negocios legales de la industria de contenidos, columna vertebral del negocio del audiovisual del futuro", explicó Pérez, quien cree que pasar por alto este problema podría llevar a "casi pedir perdón a quienes se lucran con algo que no es suyo".
Para FAPAE, "hay que ponerse serio" y aplicar las medidas contra esta lacra, que convierte a España, sólo por detrás de China, en el primer país con más piratería audiovisual del mundo. "Hay una asociación de internautas, pero internautas somos todos y no pertenecemos a esa asociación. Si no se hace algo serio no se volverá a invertir", dijo planteando medidas que "culpabilicen al que se lucra, pero protejan al consumidor final".
Los 'piratas', prosiguió, "están identificados". "La actuación no debe ser generalizada. Sí hay que decirle al que se baja contenidos en casa que no lo está haciendo bien, y hay que actuar contra los traficantes de derechos ajenos", agregó, recordando que la "triste inasistencia" de público a las salas es también causa de la piratería, pero que se ha impulsado con la celebración de la 'Fiesta del Cine', los días 21, 22 y 23 de junio, con entradas a dos euros, y que ha conseguido que algunas cadenas hayan incrementado en un 140 por ciento la asistencia a salas.