Los cinco cementerios "más terroríficos" de Europa para visitar en Halloween

Cementerio.
Cementerio. - KIWI.COM
Actualizado: domingo, 30 octubre 2022 16:22


MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -

A menudo los cementerios son lugares llenos de una arquitectura, historia y paisaje únicos, envueltos casi siempre en leyendas y misterio, lo que les convierte en espacios idóneos para visitar en fechas tan señaladas.

Por ello merece la pena incluir los cementerios en la lista de lugares turísticos que ver en una ciudad, especialmente en torno a la festividad de Todos los Santos, el Día de los Muertos o Halloween.

Estos campos santos son parte del patrimonio material cultural si se tiene en cuenta la cantidad de obras, esculturas y grabados que muchos de ellos poseen. También forman parte del patrimonio inmaterial y de la realidad antropológica, y proporcionan un contexto de los usos y costumbres vinculados con la muerte a lo largo de la historia.

Así, la empresa en tecnología de viajes, Kiwi.com, ha elaborado un listado con cinco de las necrópolis "más especiales, bellas e inquietantes" de Europa.

EL CEMENTERIO DE MONTJUIC (BARCELONA)

En primer lugar, en España sobresale el cementerio de Montjuic, situado en Barcelona y en la ladera del monte que le da nombre, desde el que se pueden ver bellas vistas del mar Mediterráneo, lo que lo convierte en un lugar único.

Esta necrópolis está considerada como una de las mejores muestras de arte funerario de Europa, ya que reúne más de 150.000 tumbas, entre nichos y mausoleos, diseñadas pensando en todas las clases sociales de Barcelona, desde las más pudientes a las más populares.

La historia del cementerio cuenta que, cuando la población de la ciudad se duplicó gracias a su prosperidad industrial y económica, en la segunda mitad del siglo XIX se derribaron sus murallas y Barcelona empezó a expandirse rápidamente. Con tanta población empezó a hacerse urgente contar con un nuevo campo santo, así que en 1883 se inauguró el Cementerio de Montjuic.

Como anécdota, el cineasta Pedro Almodóvar rodó en este cementerio una de las escenas más importantes de la icónica película 'Todo sobre mi madre'.

CEMENTERIO DE GREYFIARS (EDIMBURGO)

El cementerio de Greyfriars es uno de los más conocidos de Edimburgo por las fantasiosas leyendas que van ligadas a su nombre y al del perrito Bobby, una mascota muy querida por los escoceses cuya lápida encontramos a la entrada, aunque su cadáver realmente fue inhumado fuera del cementerio.

Esta necrópolis también ha adquirido fama mundial por ser uno de los lugares por donde paseaba a menudo la escritora J.K. Rowling, mientras estaba inmersa en la elaboración de la saga mágica de Harry Potter.

Por un lado, se cuenta que Rowling se inspiró en este campo santo para la lúgubre escena final del cementerio del cuarto libro, 'Harry Potter y el cáliz de fuego', en la que Voldemort retoma su forma física y se bate en duelo con Harry. Igualmente, en este cementerio hay tumbas que al parecer pudieron dar nombre a la profesora Minerva McGonagall y al propio Voldemort. En un rincón del cementerio, una lápida recuerda a un padre y un hijo llamados, ambos, Thomas Riddell, el nombre del famoso mago oscuro.

CEMENTERIO DEL CALVARIO (PARÍS)

Situado en el barrio de Montmartre, el Cimetière du Calvaire o Cementerio del Calvario, el campo santo más antiguo y pequeño de París (Francia), solo se puede visitar dos veces al año: el 1 de noviembre (Día de Todos los Santos) y durante las Jornadas del Patrimonio, que tienen lugar en el tercer fin de semana de septiembre.

Visitarlo es difícil, pero como dato curioso, no lo es tanto como obtener un permiso de enterramiento en él. Solo pueden conseguirlo los descendientes de las familias ya inhumadas en este campo santo. El cementerio se inauguró en 1688 en los terrenos de la Abadía de Montmartre.

Algunas de las celebridades que descansan allí son miembros de los Debray, una familia de molineros conocida por el histórico Moulin de la Galette, inmortalizado por artistas como Renoir y Van Gogh.

CEMENTERIO DE LOS PLACERES (LISBOA)

Otro cementerio que propone visitar Kiwi.com es el Cemitério dos Prazeres o Cementerio de los placeres, en Lisboa (Portugal). Se trata del lugar de enterramiento de famosas personalidades portuguesas, principalmente actores, escritores, pintores o presentadores de programas de televisión.

Su inusual nombre proviene del barrio que se halla más cercano a este campo santo, Prazeres, que significa placeres. El cementerio se creó en 1833, tras una epidemia de cólera que asoló la capital y diezmó la ciudad. La mayoría de los mausoleos de los Prazeres pertenecen a antiguas familias adineradas, como los Palmela.

Están bellamente decorados con esculturas e incluso con estatuas de los muertos. Una característica notable de muchas de las tumbas es una pequeña puerta de entrada con ventanas de cristal, a través de la cual se pueden contemplar los ataúdes, una visión, sin duda, algo inquietante.

LA ROSALEDA COMUNAL (ROMA)

En Roma (Italia), el Roseto Comunale o la Rosaleda Comunal es un lugar extraordinario por la increíble profusión de rosales que crecen entre él, lo que lo convierte en un jardín precioso. En 1645 la comunidad judía de Roma comenzó a utilizar esta zona como lugar de enterramiento, estableciéndolo como cementerio judío, que existió hasta 1934.

Después, el terreno fue vendido, sus tumbas se trasladaron al 'Cementerio del verano' y en su lugar el régimen fascista italiano creó la vía del Circo Massimo. Hoy, desde lo alto de este mágico lugar se puede apreciar el trazado del pavimento en forma de menorá, el hebreo candelabro de siete brazos, en honor al antiguo cementerio judío que estuvo allí emplazado.