El icónico árbol de Navidad del Rockefeller Center se prepara para su llegada a Nueva York

MADRID 27 Oct. (EUROPA PRESS) -

El legendario árbol de Navidad del Rockefeller Center se prepara para su llegada triunfal a Nueva York. Procedente de East Greenbush, un tranquilo pueblo al norte del estado de Nueva York, este gigante de la naturaleza --un Norway spruce de casi 23 metros de altura-- será cortado el próximo jueves 6 de noviembre y transportado 210 kilómetros hasta el corazón de Manhattan, donde aterrizará el sábado 8 de noviembre.

Su elevación en la plaza marcará el pistoletazo de salida a la temporada navideña en la Gran Manzana, un evento que trasciende fronteras y se ha convertido en símbolo universal de celebración.

La familia Russ, dueños de la propiedad donde ha crecido este coloso durante más de 60 años, ha decidido donar el árbol tras una vida entera de recuerdos familiares. "Estoy emocionada de crear más recuerdos preciados con mi familia y amigos de la infancia mientras se convierte en el Árbol de Navidad del mundo", declaró Judy Russ, quien reside en la histórica casa familiar junto a su hijo de siete años, Liam.

Durante más de tres décadas, el jardinero jefe Erik Pauze ha sido el motor de la búsqueda del árbol de Navidad más famoso del mundo. Conocido por su agudo ojo y profundo amor por la horticultura, Pauze busca árboles potenciales durante todo el año en Nueva York, Connecticut, Massachusetts y otros lugares.

Fue Pauze quien visitó por primera vez la propiedad de la familia Russ después de que un supervisor de seguridad del Rockefeller Center le hiciera llegar una foto del árbol. "En cuanto lo vi, supe que era perfecto", recuerda. Pauze incluso regresó varias veces al año para regar y cuidar el árbol él mismo.

EL CORAZÓN DE LA NAVIDAD.

El árbol, de unos 75 años de edad y que mide 13,7 metros de diámetro en su base y pesa varias toneladas, está listo para transformarse en el epicentro de la alegría neoyorquina.

Una vez en su lugar, el árbol se vestirá con 50.000 luces LED multicolores, alimentadas por casi ocho kilómetros de cableado, y coronado por la emblemática estrella Swarovski: una estructura de 410 kilos, nueve pies de ancho y más de tres millones de cristales, diseñada en 2018 por el arquitecto Daniel Libeskind.

Cuando el árbol finalmente se ilumina, el espectáculo iluminará todo Midtown, una vista impresionante que cautiva desde hace décadas tanto a neoyorquinos como a visitantes.

La ceremonia de iluminación, que data de 1933 --cuando obreros colocaron el primer árbol durante la construcción del complejo--, se celebrará el miércoles 3 de diciembre de 7 a 10 de la noche, con una transmisión en vivo por el canal NBC. Miles de espectadores se congregarán en la plaza, mientras el mundo observa cómo Nueva York enciende su espíritu festivo.

Pero la historia del Árbol de Rockefeller va más allá de las luces y el brillo. Desde 2007, su madera se dona a Habitat for Humanity, la organización sin fines de lucro que construye viviendas para familias necesitadas.

En años anteriores, las vigas de los árboles del Rockefeller Center han ayudado a construir viviendas en Connecticut, Filadelfia y en las mismas zonas de donde fueron cortadas. Algunas familias incluso tienen piezas estampadas con la insignia original del Rockefeller Center,

Como novedad de este año, quienes tengan entradas para Top of the Rock podrán disfrutar de una vista de cerca del mundialmente famoso árbol del 4 de diciembre al 10 de enero, gracias a una exclusiva experiencia de observación de árboles. Nueva York, una vez más, invita al mundo a soñar bajo sus ramas.