LONDRES 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
La aerolínea de bajo coste easyJet registró en su ejercicio fiscal, que terminó el pasado 30 de septiembre, unos beneficios de 398 millones de libras esterlinas (474,2 millones de euros), lo que representa una mejora del 56% con respecto al año fiscal anterior, según informó en un comunicado.
La 'low cost' británica registró una cifra de negocio anual de 4.258 millones de libras esterlinas (5.075 millones de euros), un 10,5% más que en el ejercicio fiscal precedente, cuando facturó 3.854 millones de libras esterlinas (4.593,8 millones de euros).
El beneficio antes de impuestos alcanzó los 478 millones de libras (569,7 millones de euros), un 50,9% más que en el ejercicio anterior.
easyJet transportó en el ejercicio un total de 60,8 millones de pasajeros, lo que supone una mejora del 4% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que su factor de ocupación mejoró en 0,6 puntos porcentuales, hasta el 89,3%.
La consejera delegada de la compañía, Carolyn McCall, consideró que los resultados muestran que "easyJet ha realizado una gran actuación durante todo el año y ha logrado avances significativos en sus prioridades estratégicas. Los resultados reflejan la continua ventaja estructural de easyJet en el mercado de corto radio europeo".
La compañía destaca que ha ajustado la deuda neta de 156 millones de libras (186 millones de euros). Además, la Junta ha propuesto repartir un dividendo especial de 44,1 peniques por acción a los accionistas, aunque aún está sujeta a la aprobación de los accionistas en la Junta General que se celebrará el 13 de febrero de 2014.
De cara al futuro, la 'low cost' explicó que, que van a continuar ofreciendo una estrategia de ofrecer a los clientes tarifas económicas a grandes destinos ofreciendo un buen servicio, para seguir liderando "un mercado cada vez más competitivo".
easyJet ha consolidado su presencia en aeropuertos con más de un 40% de los vuelos de corta distancia operados en Gatwick, Milán y Basilea. Además, la aerolínea ha anunciado la apertura de nuevas bases en Hamburgo y en Nápoles, tras la decisión de cerrar la base de Madrid.
La 'low cost' ha construido una plataforma para el futuro, incluyendo el acuerdo con Airbus hasta el 2022 para asegurar la flota de aviones.