MADRID 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Viajar en avión costará 0,58 euros más por pasajero una vez entre en vigor la nueva Tasa de Seguridad Aérea, que deberán pagar quienes embarquen en alguno de los aeropuertos españoles, independientemente de su destino o de las etapas intermedias que formen parte de su viaje.
Así consta en una de las enmiendas que el PP ha presentado en el Congreso para modificar la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, y a través de la cual se modificará la Ley de Seguridad Aérea de 2003.
En concreto, se sustituye la prestación pública patrimonial de seguridad aeroportuaria de 0,38 euros que existía hasta ahora por esta nueva tasa, que servirá para sufragar de forma directa las actividades y servicios de supervisión e inspección que realiza la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
EXCEPCIONES PARA LAS ISLAS.
Según la enmienda, a la que ha tenido acceso Europa Press, estarán obligados al pago de esta tasa los pasajeros de salida que embarquen en los aeropuertos españoles, "independientemente de las etapas posteriores intermedias que pueda realizar el vuelo y el destino del mismo".
No obstante, a la tasa se le aplicarán las "reducciones" previstas en la legislación para las Islas Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla, que suponen una reducción del 15% en los supuestos de vuelos con el territorio peninsular y del 70% cuando se trate de vuelos interinsulares.
Tampoco se aplicará al transporte de viajeros de aeronaves de Estado españolas o al servicio de las comunidades autónomas y entidades locales, siempre y cuando realicen servicios públicos no comerciales; ni a aviones de Estado extranjeros en el caso de que éstos también concedan a España una exención análoga.
La entrada en vigor de la nueva tasa se producirá a los tres meses de la publicación del proyecto de ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, si bien no se exigirá en los billetes comprados antes "con independencia de la fecha en la que se realice dicho transporte".
FINANCIAR AESA
El importe íntegro de esta tasa, que recaudará el gestor aeroportuario, será transferida a AESA para que forme parte de su presupuesto de ingresos, de tal manera que se vaya avanzando en la revisión de las fuentes de financiación de la Agencia para "garantizar su suficiencia financiera", ya que el año pasado se puso fin a las transferencias del Estado que servía para completar la recaudación de la Prestación Patrimonial, que "no llegaban a cubrir la totalidad de costes" de los servicios de seguridad.
En cualquier caso, el Gobierno asegura que esta tasa es "neutra" tanto para las compañías y operadores aeroportuarios, que "pueden repercutirla a los pasajeros en el coste de los billetes"; como para la competitividad del sector, porque "grava por igual" todos los billetes independientemente de la nacionalidad de la aerolínea o de que el aeropuerto sea o no de AENA.
Asimismo, el Ministerio de Fomento espera que este gravamen tenga un "efecto adverso mínimo" sobre el sector aeronáutico en términos de contracción de la demanda dado el pequeño importe por billete, justifican los 'populares' en la enmienda.
La AESA es el organismo supervisor de la aplicación de la normativa y procedimientos exigibles en materia de seguridad aérea para aeronaves, pilotos y tripulantes, sistemas de navegación, acreditación de compañías, mantenimiento, escuelas de pilotos, medicina aeronáutica y recintos aeroportuarios, entre otras funciones.