Foto: CEDIDA
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas ha vuelto este domingo a la normalidad después de finalizar los trabajos de renovación y mejora que durante el último mes han mantenido cerrada una de sus cuatro pistas, según ha informado Aena, que asegura que durante este tiempo se han visto afectadas el 12% de las operaciones, principalmente demoras de salida.
La pista ha permanecido inoperativa entre el 17 de abril y el 17 de mayo, debido a las obras de regeneración del pavimento y renovación del balizamiento de la pista y sus calles de rodaje, una actuación adjudicada a la empresa Dragados por valor de 14,1 millones de euros.
La pista 18R-36L es la más larga (4.179 metros de longitud) de las cuatro pistas del aeropuerto y está en servicio desde el año 1998. Es la pista que se utiliza preferentemente para el despegue de las aeronaves de gran envergadura, las que operan los vuelos transatlánticos.
Desde Aena se explica que haber estado un mes con una pista fuera de servicio "afecta a la capacidad y operatividad del aeropuerto".
En cuanto a la capacidad, se ha tenido que ajustar la demanda a la capacidad del aeropuerto durante ese mes con una pista inoperativa. Al tratarse de una actuación programada, pudo planificarse con antelación.
Por lo que se refiere a la operatividad, las compañías aéreas como operadores, Aena como gestor aeroportuario y ENAIRE como proveedor de servicios de navegación aérea, "han puesto de su parte para intentar que la afección operativa sea la menor posible".
A pesar de ello, se han producido afecciones operativas. Así, en el conjunto de los 30 días, se ha visto afectadas el 12% de las operaciones, principalmente demoras de salida.
La puntualidad media del mes registrada en los días que ha permanecido inoperativa la pista, del 17 de abril al 17 de mayo, es de 13 puntos inferior a la de ese mismo periodo del año 2014.
De manera simultánea a la obra de regeneración de pavimentos de la pista 18L-36R, cuya intervención fundamental es la regeneración de los pavimentos y sustitución del balizamiento de la pista y de las calles de rodaje, se programaron otras actuaciones: el traslado de la base de deshielo de aeronaves en la cabecera 36R y el traslado del ILS, sistema de ayuda al aterrizaje, en la cabecera 18R.
En cuanto a los detalles de la obra principal, se han regenerado aproximadamente 167.000 toneladas de pavimento flexible y 5.000 toneladas de hormigón.
ÚLTIMAS TECNOLOGÍAS Y SOSTENIBILIDAD
Para renovar la instalación del balizamiento se han utilizado las últimas tecnologías LED en luces aeronáuticas de superficie, reduciendo la huella ambiental lumínica. Se han instalado alrededor de 1.100 nuevas balizas y se tendieron en torno a 300.000 metros de cable.
Desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental, se ha aprovechado todo el material posible de la demolición del pavimento del fresado para reutilizarlo en la obra. El material de balizamiento también quedará disponible como repuesto.
Aena acomete esta actuación antes de que finalice la vida útil de la infraestructura y anticipándose así a situaciones que pudieran comprometer la capacidad operativa del aeropuerto, lo que los operadores, principalmente compañías áreas, asumen y comprenden como una prioridad.