Mataró pide el cierre de un centro de menores porque los vecinos "no pueden más"

Actualizado: miércoles, 12 enero 2011 19:14

La Fedaia insta a conciliar la convivencia con la protección de los adolescentes

BARCELONA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Mataró (Barcelona), Joan Antoni Barón (PSC), ha reclamado al conseller de Bienestar Social y Familia de la Generalitat, Josep Lluís Cleries, el cierre del centro de acogida de menores La Ribera por el aumento de la conflictividad, argumentando que los vecinos "no pueden más".

En declaraciones a Europa Press, Baron ha constatado que este centro para situaciones de urgencia, con adolescentes de 12 a 17 años, ha registrado incidentes desde su apertura en 2009, entre los que se cuentan una reciente pelea multitudinaria entre los menores en la calle y amenazas directas a los vecinos.

"La cuestión se escapa de las manos. Los vecinos han sido muy comprensivos, pero ya no pueden más", ha lamentado el alcalde, quien ha reivindicado el derecho de los residentes en el barrio de l'Havana a vivir con tranquilidad.

A su juicio, la única salida ahora es el cierre de la instalación, tras meses de búsqueda infructuosa de soluciones entre representantes municipales, vecinales y del centro, adscrito a la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia de la Generalitat (Dgaia).

"El aumento de los problemas, a pesar de la predisposición inicial de los vecinos para encontrar vías de solución, ha motivado finalmente la petición de cierre", reza la carta al conseller, señalando que el Ayuntamiento se ve obligado a priorizar la convivencia vecinal.

El alcalde confía en poder abordar la cuestión con el conseller y la nueva directora general de la Dgaia, Anna Solés, que el Govern nombró este martes.

PROTECCIÓN DE MENORES

En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Federación de Entidades de Atención y Educación a la Infancia y a la Adolescencia (Fedaia), Jaume Clupés, ha remarcado la necesidad de los centros de acogida para situaciones de urgencia, aunque ha apuntado que se trata de una situación "delicada" por la dificultad de conciliar la convivencia en el barrio con la protección de los menores.

Clupés ha constatado que estos equipamientos tienen una repercusión allí donde se ubican, subrayando la importancia de que los gestionen profesionales con experiencia, sobre todo cuando concentran a adolescentes.

"El conflicto nunca es positivo porque hace falta la máxima implicación de los vecinos", ha añadido en referencia a un posible aumento del fenómeno Nimbi ('No en mi patio trasero', en sus siglas en inglés) la tendencia creciente de los grupos vecinales a rechazar equipamientos sociales en su entorno.

Los centros para situaciones de urgencia son servicios residenciales de atención inmediata y de estada limitada --máximo seis meses-- que acogen a adolescentes inmigrantes solos y a los menores autóctonos desamparados, a cuyos padres se ha retirado la tutela.

Catalunya cuenta con nueve de estos centros --dos tanto en Tarragona como en L'Hospitalet, y uno en Barcelona, Sant Cugat, Badalona, Mataró (Barcelona) y Amposta (Tarragona)--, que evalúan la situación de cada menor, y lo derivan a otro recurso, sea una familia de acogida, un centro residencial de acción educativa (Crae) o su propia familia.

Los derivan a centros para adultos si se determina que no eran menores, como es el caso de algunos inmigrantes, mientras que los jóvenes marroquíes pueden incorporarse voluntariamente al programa Catalunya-Magreb para volver a su país.