MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha reclamado la aplicación de un nuevo sistema de financiación autonómica en el que todas las comunidades autónomas contribuyan de la misma manera a la solidaridad nacional; lo que, a su juicio, supondría que País Vasco y Navarra tendrían que aportar 3.200 millones de euros que no aportan en la actualidad.
En una Conferencia en el Club Siglo XXI, que se celebra a cuatro días de que la comunidades tengan que entregar al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas su informe de análisis del actual sistema de financiación, González ha pedido modificar el sistema de financiación autonómica, "que no satisface a nadie y es injusto y discriminatorio con Madrid, por un modelo en el que todas las comunidades autónomas contribuyan a la solidaridad nacional, incluidas País Vasco y Navarra, que en la actualidad no lo hacen".
"Si estas dos regiones aportasen con los mismos criterios que el resto, contribuirían con 3.200 millones de euros a hacer un país más equilibrado, más solidario, y un sistema de financiación más justo", ha sostenido González, quien ha rechazado la "financiación a la carta", ya que "España no puede permitirse que el 30 por ciento del total de su economía (que suman esta comunidad, País Vasco y Navarra) quede al margen de la redistribución y la solidaridad entre todos".
Para González, el nuevo modelo de financiación debe ser "transparente y claro, reconocer al cien por cien de los madrileños, respetar e incentivar la capacidad fiscal de las comunidades, garantizar la solidaridad entre españoles y la equidad para que los que más aportan no reciban en ningún caso menos de la media de lo que reciben por habitante el resto de regiones españolas" como, a su juicio, ocurre ahora con la Comunidad de Madrid, que habría perdido en cinco años "una cantidad que superaría los 10.000 millones".
"CASTIGA AL QUE MÁS SE ESFUERZA"
En este sentido, ha advertido de que el actual sistema es "tan adulterado y perverso que no reconoce a 350.000 madrileños a efecto de financiar servicios, y en el caso de la Sanidad, a más de 600.000", y ha incidido en que "es tan retorcido que castiga al que más se esfuerza y penaliza a los que más prosperan económicamente".
"Así, aunque Madrid está muy orgullosa de ser la región más solidaria, no comparte los discursos identitarios que pretenden un trato diferenciado a base de datos sacados de contexto, cuando no falsos", ha remarcado.