SEVILLA 4 May. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno, Luis García Garrido, ha presentado este miércoles el dispositivo con el que cuenta en Andalucía para el Plan contra los Robos en Instalaciones Agrícolas y Ganaderas diseñado por el Ministerio del Interior para combatir este tipo de delitos en el ámbito rural. En concreto, la Guardia Civil desplegará a un total de 1.236 agentes para este fin en la comunidad autónoma andaluza.
García Garrido ha dado a conocer los detalles del dispositivo en el transcurso de una reunión con los representantes de las asociaciones agrarias Asaja, COAG, UPA y Faeca, a la que también han asistido la consejera andaluza de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, y el general jefe de la IV Zona de la Guardia Civil, Laurentino Ceña.
Durante el encuentro se han analizado las medidas adoptadas por la Guardia Civil para hacer frente al incremento de este tipo de robos que, aunque en ocasiones son de pequeña cuantía, pueden suponer "graves" consecuencias para los propietarios por la falta de funcionamiento de las explotaciones agrícolas o ganaderas. En concreto, entre 2009 y 2010 se ha detectado un incremento de un 15,2 por ciento en el número de robos en este tipo. De ahí que se haya puesto en marcha este plan de atención preferente a dichas instalaciones, que ha arrancado el día 2 de mayo.
La Guardia Civil destinará a este operativo un total de 1.236 agentes: 164 pertenecientes a la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS), 368 de Unidades Territoriales Específicas, 362 del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y 342 procedentes de las Unidades de Reservas de todas las comandancias de la Benemérita en Andalucía. Asimismo, las unidades de Tráfico de la Guardia Civil tendrán también un importante papel en este plan, a través de la realización de controles con el objetivo de perseguir este tipo de delitos, así como la Unidad de Helicópteros de la IV Zona (Sector Aéreo Sur) de la Guardia Civil.
El objetivo esencial de este operativo será mejorar los niveles de prevención. Para lograrlo, el trabajo de la Guardia Civil se centrará en la intensificación de los servicios preventivos en las franjas horarias de mayor incidencia de este tipo de delincuencia, en la detección de vehículos sospechosos, en el incremento de los controles de carretera y nudos de comunicación, así como en la puesta en marcha de dispositivos específicos sobre establecimientos de compra-venta de material agrícola usado, entre otros.
Igualmente, se reforzarán las labores de investigación, para lo que se potenciará la labor de obtención de información y la elaboración de inteligencia específica sobre estos delitos por parte de las Unidades de Policía Judicial, al tiempo que se fomentará la participación en las labores de investigación de todas las unidades territoriales de la Guardia Civil.
Otro de los objetivos consiste en profundizar en la cooperación y en el trabajo conjunto con el sector agrícola y ganadero, y continuar manteniendo un contacto permanente con las organizaciones agrarias, y en la colaboración con los Guardas Particulares de Campo.
Con todo ello, se pretende mejorar la seguridad de estas instalaciones que, por lo general, se encuentran en grandes extensiones de terreno y presentan unas características singulares que las hacen más vulnerables, como por ejemplo que suelen estar dispersas y en muchas ocasiones se encuentran alejadas de las vías de comunicación.
INCREMENTO EN LAS PÓLIZAS DE LOS SEGUROS AGRARIOS
Por su parte, la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, ha valorado como "muy importante" este plan que cubre una "necesidad acuciante". "El robo suponía que después de estar un año entero en el campo con una inversión importante se echará todo a perder", ha subrayado.
Además, la consejera ha indicado que estos robos estaban "mermando" las posibilidades de permanencia en el campo, ya que la viabilidad en el campo se veía alterada con esos robos que son "pequeños en cuanto a cuantía, pero importantes para la viabilidad de la explotación". Asimismo, ha apuntado que a este plan también se podría sumar la acuicultura, en concreto la pesca de estero, que "en el último semestre ha visto aumentado su nivel de robos".
Aguilera también ha afirmado que, ante el aumento de robos en el campo, los seguros agrarios han incrementado entre ocho y diez puntos sus pólizas de contratación.
VALORAR LOS EFECTOS DEL ROBO
Por su parte, el presidente de Asaja en Andalucía, Ricardo Serra, ha pedido cambiar el marco legislativo para que se valoren el daño que provocan estos robos en el agricultor y ganadero, ya que "muchas veces lo que se roba vale 150 euros pero supone una incidencia de 8.000 euros". "Se debe convertir la falta en delito", ha subrayado.
En este sentido, García Garrido ha señalado que se está trabajando en que "no sea el valor del objeto sino los efectos que producen en el agricultor y ganadero lo que se debe de valorar en el proceso judicial".
Asimismo, el secretario general de COAG-A, Miguel López, tras considerar un hecho "afortunado" el contar con un plan como éste, ha llamado la atención sobre el problema de salud pública que puede crear el robo de producciones que entran en el mercado sin pasar los controles de seguridad alimentaria.
López también ha pedido que se establezcan controles en los puntos de compra y venta de los materiales y producciones robadas y ha señalado que el marco legislativo "no es disuasorio", ya que "tarda mucho tiempo".