CÓBDAR (ALMERÍA), 5 (EUROPA PRESS)
Multitud de vecinos del pueblo de Cóbdar (Almería) acudieron hoy a darle el último adiós a los tres habitantes del municipio que fallecieron el pasado jueves, después de que uno de ellos, Antonio N.C., asesinara a su esposa de 67 años, Herminia R.S. y a su hermano de 80, Rafael N.C., aquejado de Alzheimer, y posteriormente se quitara la vida.
Según informó a Europa Press, el alcalde del municipio, José Fuentes, "una gran parte" de los vecinos de la localidad, que cuenta con apenas 200 habitantes, ha acudido al mediodía de hoy al funeral celebrado en la Iglesia de Santa María de Cóbdar y, posteriormente, al cementerio donde han recibido sepultura. Allí, han mostrado su apoyo a la familia y les han ofrecido sus condolencias.
El primer edil de Cóbdar indicó que el municipio se encuentra "consternado" por este suceso, ocurrido en un "pueblo muy pequeño donde todos nos conocemos". Por ello, el Ayuntamiento ha decretado tres días de luto, que finalizan el próximo lunes.
El Juzgado de Instrucción de Purchena se ha hecho cargo de las diligencias del doble crimen a las que se adjuntarán los informes médicos forenses que concluyan de las tres autopsias que se practicaron en el Instituto de Medicina Legal.
Los que conocían de cerca a la familia, con los que mantenían estrechos lazos de amistad algunos ediles de la Corporación local, no podían ocultar su consternación ante lo que han calificado como "un golpe muy grande fruto de la desesperación y la angustia". Coinciden en señalar, según los testimonios recabados por Europa Press, que Antonio N.C., agricultor de profesión aunque ya jubilado, era "un buen hombre al que se le había complicado la vida".
En concreto, aludían al hecho de Herminia estuviese bajo tratamiento médico debido a "una fuerte depresión" tras atender y prestar cuidados a su cuñado enfermo durante años, además de estar convaleciente de una intervención quirúrgica, mientras que el primer edil se lamentó al asegurar que sus vecinos no informaron de la situación. "No nos habían dicho nada, si nos hubieran dicho que tenían problemas hubiéramos gestionado ayuda para ellos, les hubiéramos echado una mano", aseguró.
LOS HECHOS
El doble crimen se registró el jueves pasadas las 8,00 horas. El servicio unificado de emergencias 112 tuvo conocimiento de los hechos después de que la fallecida, "visiblemente nerviosa", telefonease a su hija, residente en la capital, la cual se puso en contacto con una amiga íntima de la familia para que acudiera al domicilio familiar.
En el inmueble de la calle San José se personó, junto a los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil, un equipo del servicio de emergencias sanitarias 061 que certificó la muerte de los tres ancianos.