GRAZALEMA (CÁDIZ), 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las dependencias municipales de Benamahoma (Cádiz) serán la sede, del 3 al 5 de mayo, de la segunda edición de las jornadas dedicadas a la cagarria, una seta, perteneciente al género morchella, que en otros lugares recibe el nombre de colmenilla.
Según ha indicado la Diputación en una nota, las previsiones del programa se han presentado en la institución provincial por parte del responsable del área de Desarrollo Económico y Servicios a la Ciudadanía de Diputación, Jaime Armario; el alcalde de Grazalema, Carlos García Ramírez; y la responsable de la firma Mico Time, Isabel Casillas.
En el Parque Natural de Grazalema, según ha explicado Carlos García Ramírez, la presencia de la cagarria se asocia a la riqueza botánica de un enclave que es reserva de la biosfera. De hecho la cagarria se asienta junto a los pinsapares.
Su consumo hasta hace poco se restringía a las cocinas particulares, sin apenas repercusión comercial, si bien ya se empieza a degustar en algunos restaurantes grazalemeños. Según el guiso o la elaboración su textura puede ser tierna o crujiente, aunque también puede pulverizarse y servir de condimento en pastas o arroces. En cualquier caso la cagarria no puede ingerirse fresca y requiere un tratamiento de secado para evitar intoxicaciones.
En la actualidad este tipo de setas que llegan al mercado proceden de China o Estados Unidos y en España aún no se ha establecido un sistema de cultivo que propicie la comercialización de este producto, por lo que se concibe como una potencial fuente de negocio y de creación de empleo.
Según ha explicado Isabel Casillas, su valor es elevado, ya que "al tener que desecarse, de cada cuatro kilos se puede obtener un kilo para el consumo, por lo que los 100 gramos podrían costar entre 100 y 200 euros, dependiendo de la procedencia y la estacionalidad".
Las jornadas abren diversas oportunidades para conocer el Parque Natural de la Sierra de Grazalema, contemplando salidas al campo, visitas al pinsapar, encuentros con micólogos expertos, demostraciones de cocina y hasta un concurso fotográfico. Ya se han agotado las 50 plazas que se diseñaron como aforo inicial, si bien la organización ha ampliado el cupo hasta 20 inscripciones adicionales.
Por su parte, Jaime Armario ha destacado la organización de una iniciativa que permite visibilizar un producto de gran valor culinario, "que además propicia lo que busca actualmente el turista: ganar experiencias, gracias a ese paraje único como es el Parque Natural de la Sierra de Grazalema".
