SEVILLA 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las empresas andaluzas se encuentran entre las regiones que más invierten en proteger a sus directivos, según el IV Estudio Marsh sobre el mercado español de seguros de D&O, que apunta que las empresas andaluzas figuran las terceras en el ranking nacional.
Según indica Marsh en una nota, a nivel nacional, un 30 por ciento más de empresas protegieron a sus consejeros y directivos en 2010 y contrataron el seguro de responsabilidad civil de D&O (consejeros y directivos) con el fin de "alcanzar seguridad y protección en su gestión ante las turbulencias de la crisis económica, y reforzar su gobierno corporativo". Asimismo, las empresas españolas invierten casi 120 millones de euros en proteger a sus directivos.
El estudio constata en apenas cuatro años (2006 a 2010), las contrataciones de este tipo de seguros se han disparado más de un 200 por ciento y precisó que sólo el año pasado, se incrementaron un 30,14 por ciento, lo que significa que el mercado español ya cuenta con 23.669 pólizas para consejeros y directivos.
Por comunidades autónomas, Madrid (23,5 por ciento), Cataluña (19 por ciento), Andalucía (12 por ciento) y Comunidad Valenciana (nueve por ciento) detentan más del 70 por ciento de la cuota de mercado del seguro de D&O en España, siendo las empresas del sector industrial las que más lo contratan, en una proporción de dos industriales por cada una de servicios.
Las empresas españolas invirtieron en 2010 casi 120 millones de euros en proteger a sus directivos (119.608 millones), un 3,7 por ciento más que el año anterior.
Estas cifras denotan, a juicio de Marsh, "la creciente demanda de este seguro en los últimos años, ya que en 2003 el volumen de primas apenas alcanzaba los 30 millones de euros en España".
Asimismo, indica que la prima abonada por las empresas para proteger a sus altos cargos "se ha reducido de media casi un 20 por ciento, pasando de 6.325 a 5.053 euros, manteniéndose la tendencia a la baja", aunque ha puntualizado que se trata de una cifra promedio, ya que la exposición al riesgo varía en función del sector de actividad y de la tipología de empresa.